La decisión del Grup Independent de Sueca, Perelló i el Mareny (GISPM) de aceptar entrar a formar parte del gobierno municipal suecano, con su portavoz, Julián Sáez, como regidor delegado de Comunicación pese a estar en la oposición está dando mucho que hablar. En la última sesión plenaria, los miembros del partido votaron en contra de algunos de los puntos propuestos por el equipo de gobierno de Dimas Vázquez y se abstuvieron en el punto que trató la dedicación y retribuciones de los miembros de la corporación, que aprobaba precisamente a Sáez como titular de Comunicación. El expresentador de la televisión local expresó al respecto que el GISPM tratará de demostrar «que se puede ejercer una función útil para Sueca desde la oposición», según sus palabras.
Durante la sesión, Julián Sáez recordó que el partido independiente «siempre ha dado la cara y nunca se ha escondido desde que se fundó en 2011», y se refirió a su discurso en el pleno de investidura, en el que dijo que ya recordó «la condición del GISPM como partido independiente» que buscaría ser útil para la ciudadanía «desde el lugar que correspondiese». Respecto a la abstención del partido al aprobarse las retribuciones del ayuntamiento, la concejal Noelia Benedito argumentó que había una «falta de transparencia en la propuesta y un desequilibrio evidente entre los salarios y las dedicaciones de algunos de los ediles del gobierno de PSPV y Ciudadanos».
Respecto a la política que ha adoptado el alcalde, ofreciendo competencias a los distintos grupos municipales, Sáez tildó esta práctica como un «experimento» político durante el que, con todo, prometen «total lealtad al Ayuntamiento de Sueca como institución», según expresó. «Noelia (Benedito) y yo seguiremos sentados en la parte de enfrente del gobierno municipal, fiscalizando su gestión. Votaremos a favor de aquellas cosas que consideremos bien hechas y lo haremos en contra cuando no estemos de acuerdo», prometió el nuevo delegado de Comunicación, quien anunció que donará las dos pagas extras anuales, de 600 euros cada una, a asociaciones benéficas locales.
Críticas de Compromís
A Compromís, al que Dimas Vázquez arrebató la alcaldía con un pacto que ha hecho correr ríos de tinta, el nuevo primer edil también le ofreció una concejalía, en su caso la de Promoción Lingüística, que la coalición valencianista rechazó. Los nacionalistas también lanzaron críticas al GISPM por aceptar competencias en su caso. El grupo independiente rehusó el enfrentamiento y se limitó a mostrar «absoluto respeto» a la renuncia de Compromís. «El GISPM hará oposición al gobierno local, nunca hará oposición a la oposición», zanjaron.
