La ejecutiva del PSPV-PSOE ha expresado su malestar respecto a los términos del pacto de gobierno alcanzado en Catadau entre el grupo local de Compromís y los independientes liderados por el exalcalde Manuel Bono, por el hecho de que este último vaya a cobrar un sueldo público como teniente de alcalde liberado. Tanto es así que ayer trasladaron su voluntad de que la dirección de Compromís intervenga «con una respuesta firme», para evitarlo, según declaró José Muñoz,secretario de Organización del Partido Socialista en la Comunitat Valenciana.
Bono fue expulsado del PSPV-PSOE tras conocerse que, siendo alcalde de la localidad, avaló con su firma la solicitud de se relajara la orden de alejamiento a un condenado por violencia de género para que pudiese visitar, en sus permisos penitenciarios, a sus padres. Se presentó a las elecciones del 26-M como independiente y fue la segunda fuerza más votada, con cuatro regidores electos. Que vuelva a formar parte del ejecutivo de Catadau, con sueldo incluido, merced al acuerdo de gobierno que alcanzó con el grupo local de Compromís ha molestado al PSPV. Para Muñoz es «simplemente inaceptable» que tenga un sueldo público. «Pensamos y suponemos que se trata de una decisión adoptada por la agrupación de Compromís en Catadau, pero esperamos que la dirección evite esta situación», verbalizó el dirigente socialista.
Según agregó Muñoz, la lucha contra la violencia de género es «una de las bases del Botànic», y el apoyo de Compromís a Manuel Bono en Catadau supone un ataque contra esa lucha. «Un asunto así no se puede esquivar diciendo que se trata de un tema de pueblo. Esta lucha contra el machismo es una obligación para todos los partidos políticos, y sean cuales sean las circunstancias», expresó.
Por casualidades de la agenda política, la sesión plenaria en la que se aprobarán las retribuciones del ayuntamiento de Catadau para la próxima legislatura coincidirá en el tiempo con la reunión entre los partidos del gobierno valenciano del seguimiento del Pacte contra la Violència de Gènere. «Choca que Mónica Oltra vaya a esa reunión y que, al mismo tiempo, su partido esté facilitando la entrada en política de Manuel Bono», significó el secretario autonómico del partido socialista.
Así, en aras del Pacte del Botànic, los socialistas exigen a sus socios de gobierno que tengan «la misma mano dura» que mostraron ellos a la hora de expulsar de sus filas a Manuel Bono, según demandó el secretario de organización socialista. «No hay más. Especialmente ahora que se cuestiona desde otros partidos políticos, todos debemos hacer más fuerza por la igualdad de género y la lucha contra el machismo», sentenció Muñoz.
Única línea roja, la alcaldía
Desde la coalición Compromís, por su lado, afirmaron que la única línea roja que había colocado el partido era que Manuel Bono no ocupase el cargo de alcalde de Catadau a lo largo de la legislatura. Y, en efecto, según el pacto de gobierno alcanzado en Catadau, será otra persona de la lista independiente que lideraba Bono quien ejercerá de primer edil en los dos últimos años de la legislatura. «Aunque aún no está decidido, ya que el pacto no ha sido firmado», explicó ayer al respecto Hèctor Roig, actual alcalde de la localidad: «Decidimos el reparto de regidorías y delegaciones, en cierta manera para mostrarles el agradecimiento de habernos apoyado en la investidura». Los votos a favor del alcaldable Hèctor Roig por parte de la lista independiente de Bono llegaron prácticamente por sorpresa en aquella sesión. Con todo, «tan solo está claro que Manuel Bono no será alcalde de Catadau», remató Roig. Queda por ver si esto es suficiente.
