Una niña de apenas año y medio se quedó encerrada a mediodía de ayer en el interior de un vehículo estacionado en la calle Mayor San Agustín de Alzira y, tras un intento fallido de forzar la apertura de la puerta por parte de un profesional, agentes de la Policía Local optaron por romper una de las ventanas delanteras del vehículo para rescatar a la pequeña. El coche se encontraba afortunadamente aparcado a la sombra en una jornada de intenso calor aunque en el momento en que los padres pudieron sacar a la niña del vehículo ésta presentaba un buen sofoco. Lloraba asustada, muy probablemente por los golpes descargados para reventar la ventana del turismo. Todo quedó afortunadamente en un susto.

La madre se limitó a comentar que la niña había permanecido encerrada en el interior del vehículo alrededor de un cuarto de hora. Al parecer, había sido la pequeña la que había accionado el mando que provocó que se quedara atrapada cuando los padres habían bajado del vehículo.

Los hechos sucedieron ayer a mediodía en la zona de carga y descarga habilitada al principio de la calle Mayor San Agustín y los padres recurrieron en un primer momento a un profesional que trató de abrir la puerta causando el menor daño posible, aunque no lo consiguió. Con posterioridad llegó una patrulla de la Policía Local de Alzira que buscó una fórmula más rápida. Los agentes optaron por romper la ventana situada en el extremo opuesto al lugar que ocupaba la pequeña -que permanecía sentada en su sillita en el asiento trasero- y golpearon con su defensa extensible el cristal hasta que finalmente saltó en mil pedazos, lo que permitió abrir el cierre centralizado del vehículo y que la madre se abrazara con la pequeña tras unos momentos de angustia. La niña no sufrió daños.