La fiesta de Moros y Cristianos de Alzira ha arraigado en la ciudad que vio morir a Jaume I. Miles de espectadores poblaban el recorrido por el barrio histórico de la Vila y el antiguo trazado del Xúquer que hoy alberga las avenidas Luis Suñer y Sants Patrons. La veterana Comparsa Mora de la Vila preparó una sultanía en honor al máximo representante, Voro Boluda, acompañado en lo alto de la carroza por Carmen Martínez Peyró, hija del fundador de la fiesta, Toni Martínez 'Conill'. Les seguían 80 tambores como homenaje a la Tamborada alzireña.
Las chilabas de gala precedían a las primeras escuadras:Moros Realistas de Villena, Samanidas y Abbasies, y una de Carcaixent, Alzayan's. En la carroza infantil iba el futuro de la fiesta, con Nayara Giménez y Arón Torres en la cima. Luego entraba la primera filà femenina dirigida por Mila Martínez, que obtuvo el premio al mejor traje. Tras ella llegó la filà masculina con Juan Alfonso Gómez al frente y la segunda femenina, cuya cabo, Clara Javier, fue la mejor del bando moro en su debut. Una preciosa coreografía de Ontinyent dio paso al Sultán, que iba flanqueado por su guardia.
Al tocar año de Sultanía abría el desfile el bando cristiano con la filà Creuats de Quart y Creuats Riberencs, cuyo cabo, Vicent Castillo, fue considerado ex aequo el mejor de las tropas de la Cruz. Otra filà con muchos componentes infantiles, la de Corsàries de la Ribera lució otro espectacular traje. Las falleras mayores de Alzira, Mer Bohigues e Inés Brines condujeron a sus cortes de honor. Les siguieron los tambores de batalla que abrían paso a Na Violant, Marian Sanz, y el rey en Jaume, Vicente García. Tras ellos, la filà Conqueridors con David Mercado y Rafa Fita al frente. Para celebrar su décimo aniversario cerraba el bando cristiano la filà de Contrabandistas-Bandoleras. Tras su gran carroza desfilaron la filà infantil, Contrabandistas de Catarroja y sus dos escuadras, dirigidas por Adela López y Rosa Villena, que ganó por segundo año el premio a la mejor cabo cristiana.Una lucha de guerreros del Medievo dio paso a las tropas de la Media Luna: la filà Mercaders, que estrenó nuevo traje y escudos.
