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El Consell presupuesta al fin el Palau de Justícia y la autovía a Carcaixent

El presupuesto de 2020 contempla una inversión de 37,4 millones en la Ribera, la cifra más baja desde 2017 Ford acapara un tercio de las cuentas

El Consell mantiene la Factoría Ford como una de las inversiones más fuertes en la comarca. vicent m. pastor

Mucho papel y muy poco cemento. El proyecto de presupuestos presentado por el Consell para el ejercicio 2020 aparca las grandes inversiones de la comarca, aunque las tiene presentes. Algunas de las infraestructuras básicas para la Ribera no tendrán su primer ladrillo colocado, al menos, hasta 2021. El Govern del Botànic destinará el próximo año 37,4 millones de euros, la cifra más baja desde 2017.

Dos son los elementos clave que el Consell ejecutará en los próximos años en la Ribera: la construcción del anhelado Palau de Justícia de Alzira, que permitirá unificar las dispersas dependencias actuales, y la conexión de Carcaixent con la autovía, casi tan deseada como el complejo judicial alcireño. No obstante, no se espera movimiento de máquinas. El gobierno valenciano estima la primera infraestructura en 16,5 millones de euros, aunque para el año que viene destinará algo más de 100.000 euros -lo justo para redactar el proyecto de obras definitivo y con suerte llevar a cabo su licitación de cara al próximo curso-. En 2021 y 2022 se realizarían sendas inversiones de 8 millones. En el caso de la segunda el coste superaría los 15 millones de euros, aunque el próximo año se contará con una partida similar a la anteriormente mencionada, nuevamente para redacción de proyectos. En 2021 la inversión sería de dos millones mientras que el año siguiente la cifra llegaría a los trece.

Otras grandes inversiones esperadas que tampoco se ejecutarán con la premura deseada están relacionadas con el sector sanitario. Las ampliaciones de los centros de salud de Alberic o Algemesí ya figuraban en los presupuestos de 2019 y vuelven a estar en los del próximo ejercicio. En el primer caso se contemplan 30.000 euros y en el segundo, medio millón de euros. Aunque se espera que para cada uno de ellos se destine otro millón más en 2021.

Mientras el conseller de Hacienda, Vicent Soler, vendía a bombo y platillo los presupuestos más altos de la Generalitat, a la Ribera le toca conformarse con unas cuentas que parecen recicladas. Muchos proyectos y consignaciones se repiten un año más. Además de los citados, reaparecen de nuevo el centro auxiliar de Corbera, la construcción de una pantalla acústica en la CV-50 a su paso por Alzira, la nueva fase de la canalización de Les Basses, el proyecto de protección del Magre en Real, el centro auxiliar de Alcàntera o las mejoras del regadío en Antella y Alberic. También se esperaba hacer lo propio en la comunidad de regantes Masalet de Carlet, proyecto ya previsto en 2019 con una dotación millonaria y que para el próximo año contará con 300.000 euros, a los que se sumarán dos millones en 2021 y 800.000 euros en 2022.

Pese a las múltiples amenazas y recortes en la Factoría Ford de Almussafes, el Consell vuelve a cumplir con la marca automovilística. El próximo año se llevará más de 13 millones de euros. Ya es habitual que acapare una tercera parte de los presupuestos autonómicos en la comarca. A esos 13 millones se le podrían sumar los 18,7 de las diferentes partidas de la conselleria de Mónica Oltra. Ford y el área de Políticas Inclusivas suponen el 85,8 % de la inversión en la Ribera. Más allá de esas partidas, la intervención con mayor dotación monetaria será la reforma de l'Escolaica de Cullera, con 1,2 millones de euros.

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