Los vecinos de Fortaleny se volcaron de lleno con la cuarta edición del pasaje del terror, una actividad con la que la localidad celebraba de manera particular el popular Halloween. La actividad reunió a un millar de personas.

Más de 50 personas de todas las edades tomaron parte en la elaboración, confección y, sobre todo, de la puesta en escena de un pasaje del terror que se ubicó en el casal fallero de la comisión Foc i Tradició de la localidad de la Ribera Baixa. Entre todos prepararon un terrorífico pasillo de 150 metros de longitud.

Este pasaje del terror ha alcanzado cierta popularidad en la Ribera Baixa y se ha convertido en una visita obligada para aquellos que celebran la noche de Halloween. De hecho, reunió a un millar de personas en las dos sesiones en las que estuvo activo, la noche del jueves y la del sábado.