El presidente de la Associació de Veïns de l'Alquerieta, Ricardo Cuenca, aprovechó la asamblea para anunciar que el 15 de enero formalizará su renuncia al cargo, cerrando una etapa de más de cuatro años. Cuenca dice estar «quemado», considera que la situación del barrio ha mejorado, pese a los problemas que aún padece, y que los vecinos «no lo valoran». «El problema que tenemos es la seguridad», comentó, mientras se mostraba especialmente agradecido a la Policía Nacional. «No tengo queja», comentó.