Duro correctivo el que sufrió en su último partido el Inter Cullera en su último partido, disputado en el campo Juan Palomares Corella. Los pupilos de Juanvi Chornet y Rafa Beltrán sufrieron mucho por la gran cantidad de bajas con las que se presentaron a un partido que acabó 0 a 67.
A pesar del dominio que mostraron los de Cullera en los rucks, en las melés y en los touches, no fue suficiente para poder contener la fuerza y el ímpetu de los jugadores del UER Montcada.
Los visitantes salían rápido a la contra, en especial por las alas, y anotaban ensayo tras ensayo. De hecho, al descanso se llegó con un contundente 0 a 27, lo que dignificaba el juego a la mano realizado por los de Montcada.
Tras la charla en los vestuarios, los de la Ribera intentaron olvidar las numerosas bajas que sufrían e intentar remontar el partido o, al menos, recortar las diferencias. Pero sus intentos únicamente sirvieron para que los visitantes aumentaran todavía más su ventaja en el marcador, nuevamente, a través de rápidos e implacables contragolpes. Ocurrió un hecho insólito y es que cada vez que el equipo perdía un balón, el Montcada llegaba a la línea de ensayo local. Este hecho hizo mella en los jugadores del Inter, que se hundieron psicológicamente y finalmente perdieron el encuentro por un claro 0 a 67.