Cullera ha acogido un curso de formación dirigido a los porteros de fincas. Se trata de una iniciativa que se ha celebrado anualmente en la localidad que busca mejorar los servicios que puedan prestar los responsables de las fincas urbanas. Por ejemplo, se les ha instruido en la extinción de incendios o en el rescate de personas atrapadas en un ascensor.

Este año se ha trabajado con los responsables del funcionamiento de las fincas el tema de las molestias de los vecinos y cómo tienen que actuar por si el caso se llegase a judicializar. Además, de forma paralela, se celebró una jornada completa de prevención de incendios en las que han utilizado mangueras de presión y extintores, gracias al asesoramiento técnico del Consorcio Provincial de Bomberos.

Asimismo, el colectivo visitó una fábrica de ascensores en la que hay uno de prueba. De ese modo aprendieron a rescatar a las personas que se pueden quedar atrapadas en una cabina con total seguridad y a actuar ante pequeñas emergencias

«Estos cursos se hacen para que los conserjes tengan una formación continua y están subvencionados íntegramente por la Seguridad Social. El año pasado, por ejemplo, aprenedieron la reanimación cardiopulmonar», explicó Óscar Pellicer, organizador de los cursos.