La construcción del nuevo mercado «al detall» de Alzira para reubicar a los comerciantes desalojados por la conversión de las antiguas instalaciones de la calle Riola en la sede de la Oficina de Tráfico pronto evidenció que, pese a la reducción de tamaño ya que únicamente se diseñó un recinto con trece paradas, sobraba mercado. No sólo no se han ocupado nunca todos los puestos sino que, por momentos, la imagen habitual era la de un recinto semivacío con más persianas bajadas que abiertas. La situación no ha mejorado en exceso, pero el ayuntamiento, de la mano de los comerciantes que operan en esta instalación municipal, se dispone a realizar un nuevo intento para revitalizar el mercado. El objetivo principal es darle visibilidad y, con este fin, una de las medidas más llamativas será trasladar a estas dependencias la Oficina Municipal de Información al Consumidor (OMIC) para propiciar un mayor tráfico de personas, según ha adelantado el concejal de Servicios Públicos, Fernando Pascual.

«Para que el mercado se conozca, dentro del año 2020 instalaremos la OMIC en estas dependencias, primero la oficina municipal, pero la intención de la concejalía de Sanidad y Consumo es poder conveniar el servicio con la Mancomunitat de la Ribera Alta, igual que se hizo con la oficina de la vivienda, y de esa forma daríamos una mayor visibilidad al mercado», destacó el edil. Pascual detalló que actualmente hay ocupados cinco de los trece puestos, contando la cafetería, si bien el ayuntamiento recibió días atrás una nueva petición.

«La idea que llevamos en esta legislatura es intentar dinamizar el mercado y vamos a empezar con una campaña de Navidad. Los vendedores argumentan que el mercado on se conoce lo suficiente y vamos a ver si en esta campaña lo conseguimos», comentó el edil, mientras incidía en la voluntad de aprovechar espacios vacíos en el mercado de la Plaça de la Sang para reubicar la OMIC, que actualmente se ubica en la Casa Tena, un inmueble que linda con la casa consistorial y que comparte con el departamento de Sanidad y los alguaciles. Fernando Pascual comentó que hay consultas o temas de arbitraje en la OMIC «que requieren de privacidad» y comentó que el nuevo emplazamiento ofrece en este sentido más garantías.

Por otra parte, el edil indicó que también se han recogido las sugerencias de los vendedores para que este espacio pueda ser utilizado para exposiciones y otros actos lúdicos, otra fórmula que puede contribuir a dar a conocer el mercado y a propiciar un flujo de potenciales clientes. «Se trata de una propuesta novedosa que considero asumible y ofreceremos este espacio a las entidades culturales para la celebración de determinados actos», indicó el edil. Otras iniciativas que se prevé realizar son incorporar el mercado «al detall» a la campaña de «tardeo» de los viernes -algunos puestos pretenden ofrecer sus productos- o renovar la cartelería exterior con información más detallada de la oferta existente en el Mercat de la Vila. «Aunque muchos lo conocen, los comerciantes dicen que no tiene una visibilidad adecuada y vamos a intentar con la ilusión que han puesto los vendedores hacer todo lo que esté en nuestras manos para revitalizarlo. Si lo damos a conocer, puede haber otros comercios que sí vean un atractivo y ocupen los espacios vacíos», incidió.