El estudio realizado por el Instituto Geológico y Minero identifica un área «inicialmente favorable» para la instalación del vertedero comarcal, la tercera infraestructura que precisa el consorcio para ser autosuficiente en la gestión de los residuos, aunque advierte de que esta zona del término municipal de Guadassuar presenta también algunas «dificultades y condicionantes» derivados de la «gran ocupación del territorio» y de los «complejos y ajustados límites» que conforman el término de Guadassuar.
Este primer informe, no obstante, emplaza a que se corrobore la idoneidad del emplazamiento desde el punto de vista geológico tanto mediante un campaña de prospección geofísica como a través de los sondeos mecánicos de investigación necesarios, según las conclusiones del documento que se leyó el martes durante la junta del Consorcio de Residuos Ribera-Valldigna.
El presidente del consorcio y, a su vez, alcalde de Guadassuar, Voro Montañana, se mostró prudente tras esta primera lectura y admitió que el emplazamiento en el entorno de la Acequia Real del Júcar resulta «problemático».
