El proyecto de contribuir a alimentar la subestación eléctrica de Catadau con plantas fotovoltaicas no se limita únicamente al término vecino de Llombai. El Ayuntamiento de Real también ha tenido conversaciones con una empresa interesada en arrendar una superficie próxima a las 42 hectáreas de propiedad municipal -en torno a 500 hanegadas- con el mismo objetivo, según ha desvelado el alcalde, Antonio Hernándiz, que advirtió de que, al parecer, también esta mercantil habría contactado con particulares en busca de una mayor cantidad de terreno.

Hernándiz concibe la propuesta como una forma de dar un uso a una zona muy degradada ya que allí se concentraban tanto vertederos como canteras -«se trata de un terreno que parece Marte», resumió de forma muy gráfica-, aunque también aclaró que no hay nada cerrado todavía y que está previsto retomar las conversaciones la próxima semana.

El alcalde de Real dejó claro que, en el caso de que se autorizara la instalación de esta planta fotovoltaica, las placas no afectarían a ningún vertedero ya que, según dijo, son espacios para «regenerar». Con todo, mostró la voluntad del ayuntamiento de ofrecer la máxima superficie posible, teniendo en cuenta que se trata de parcelas «en las que no hay nada» y que la empresa busca superficies planas y bien orientadas al sur.

Antonio Hernández explicó que los promotores barajan que puede ser viable hasta una distancia de 15 kilómetros entre las plantas fotovoltaicas y la subestación de Catadau y comentó que, en el caso de Real, la separación es de 7 kilómetros.

Como adelantó el miércoles Levante-EMV, varias han empresas han realizado un trabajo de captación de terrenos en Llombai para conocer la disposición de los propietarios a vender o alquilar sus campos para construir una planta fotovoltaica que se contempla como un complemento para alimentar la subestación eléctrica de Catadau. El alcalde de Llombai, José Forés, reveló que los promotores pretenden utilizar una superficie próxima a las 3.000 hanegadas, lo que representa casi la mitad del terreno cultivable en el término municipal.