La reunión celebrada ayer en Algemesí entre representantes del sector agrario de la localidad y la eurodiputada Inmaculada Rodríguez-Piñero, el director general de Agricultura, Roger Llanes, y el diputado autonómico David Calvo sacó una conclusión muy clara: el histórico minifundismo ni es rentable ni es viable.
El sector agrario reclamó nuevamente a Europa que se apliquen a los productos que se importan las mismas que un productor valenciano tiene a la hora de exportar a otro país. Asimismo, insistió en que, de no hacerse nada, «se dejarán de producir cítricos». Asimismo, lamentaron que cada vez más gente opte por abandonar los campos, «es una situación que se tiene que revertir pero hacen falta más incentivos».
En ese sentido, se abordó el preocupante relevo generacional que sufre el campo. «Alrededor del 30 % de las producciones están en manos de personas de 65 años. Sólo el 5 % lo está en las de agricultores de 35», manifestó Calvo. Llanes, por su parte, animó al sector a mejorar la producción: «Hay cosas que cambiar, incluso si logramos acuerdos a nivel europeo que nos garanticen unas reglas más justas para todos. Hay otros países que han visto que ganábamos mucho dinero con los cítricos y han aprendido a producirlos, pero también han mejorado los procesos de producción».
La eurodiputada socialista, por su parte, abogó por seguir los pasos de los agricultores neerlandeses: «Tenemos que promocionar el cooperativismo. Tenemos un ejemplo clarísimo en la Unión Europea que es Holanda, que cuenta con completo régimen cooperativista desde la producción hasta el consumidor final; por eso es la agricultura más rentable. Aquí tenemos las mejores condiciones, pero no la mejor capacidad de comercialización», aseguró, para añadir a continuación: «También tenemos que ayudar a bajar los costes de producción. Hay que combatir el minifundismo para reducirlos, sin cambiar la propiedad y apostando por mancomunar la gestión de la producción».
Asimismo, Rodríguez-Piñero defendió que se deben realizar los cambios necesarios para que el sector productivo tenga capacidad de decisión a la hora de fijar precios: «Tenemos que actuar para mejorar la organización del sector porque el minifundismo no ayuda a tener capacidad de controlar los precios, que son impuestos por tres grandes distribuidoras y hay una estructura productiva muy atomizada. Hay que contribuir a que haya una fijación de precios en origen que sea rentable en toda la cadena de valor».
Por su parte, la alcaldesa de Algemesí, Marta Trenzano, destacó la importancia de «combatir la demagogia con una mayor información en este tema, que los eurodiputados vengan aquí, pisen el terreno, escuchen las reivindicaciones del sector y que nos den información real de que está pasando y que medidas se pueden adoptar para paliar la grave situación del campo».
