La Policía Local de Cullera ha intensificado las tareas de concienciación, control y vigilancia sobre el uso de la mascarilla de protección frente a la COVID-19. El Ayuntamiento de Cullera ha reforzado la campaña de concienciación sobre su uso responsable. La medida se ha anunciado justo un día después de desvelarse la presencia en la ciudad de tres inmigrantes contagiados que permanecen aislados en un local asociado al Centro de Refugiados de Cullera (CEAR), aunque fuentes municipales descartan que la acción policial esté relacionada con esta circunstancia.

Los agentes recuerdan a los ciudadanos que no llevar la mascarilla cuando resulta necesario podrá ser sancionado con multas de hasta 100 euros. No obstante, el inspector de la Policía Local, Alfredo González, ha matizado que lo que en realidad interesa «no es sancionar ni tomar medidas drásticas sino que la gente se conciencie, aplique el sentido común y se acostumbre a ponerse la mascarilla al salir de casa».

La campaña aprovechó ayer que los jueves se celebra el mercadillo en Cullera, un espacio abierto en el que se puede concentrar mucha gente. Varias patrullas de la Policía Local recorrieron las calles que ocupan los puestos del mercado ambulante para informar a la ciudadanía sobre el uso obligatorio de la mascarilla en determinadas circunstancias y controlar el cumplimiento de las directrices sanitarias al respecto.

«Sí o sí»

El uso de la mascarilla es obligatorio en la vía pública, así como en espacios al aire libre y cerrados siempre que resulte difícil garantizar la distancia mínima de seguridad de al menos 1'5 metros. Aún así, la Policía Local recomienda llevarla «sí o sí» porque la mayoría de veces es inevitable guardar la distancia de seguridad.

El cuerpo policial seguirá llevando a cabo estos controles en distintos puntos de la ciudad, como por ejemplo en el Paseo Marítimo, para maximizar la protección de la ciudadanía en el municipio, puesto que como informa el Ministerio de Sanidad el uso de la mascarilla es el mejor escudo de prevención de la COVID-19.

La campaña viene haciéndose los últimos meses a través de varios canales de redes sociales y cartelería y ahora se refuerza a pie de calle con la implicación de la Policía Local y la colaboración de voluntarios de Protección Civil.