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Urbanismo

La Sareb admite que es "inviable" acabar el centro comercial Vilella

El propietario de la estructura de hormigón logra frenar el procedimiento que abría la puerta a la expropiación - El ayuntamiento recuerda que el inmueble puede tener un uso diferente al inicial

La Sareb admite que es "inviable" acabar el centro comercial Vilella

La Sociedad de Gestión de Activos Procedentes de la Reestructuración Bancaria (Sareb), titular de la estructura de hormigón del frustrado Centro Comercial Vilella de Alzira, considera «inviable» la finalización de este complejo con las dimensiones y la finalidad con la que se proyectó, según se desprende de las alegaciones formuladas contra la resolución del ayuntamiento que ordenó su inscripción en el Registro Municipal de Solares y Edificios a Rehabilitar al incumplir la obligación de edificar.

La Sareb ha conseguido frenar esa inscripción, que abría la puerta a una expropiación o venta forzosa si el propietario no ofrecía una alternativa que podía pasar por la finalización de las obras o la demolición, si bien el ayuntamiento mantiene en su respuesta que se ha producido un incumplimiento «evidente» del deber de edificar y recuerda al «banco malo» que en cualquier momento puede incoar un nuevo procedimiento para forzar una solución definitiva a este inmueble que permanece inacabado en uno de los accesos a Alzira desde hace más de una década.

El alcalde de Alzira, Diego Gómez, ya dejó claro tras el órdago lanzado a la Sareb el pasado mes de septiembre que «el fantasma del Centro Comercial Vilella» no podía quedarse en pie para siempre. El ayuntamiento trata de forzar una solución que permita bien finalizar la obra aunque sea con un uso diferente o, en su defecto, proceder a la demolición. La Sareb impugnó aquella resolución municipal y ha conseguido frenar la inscripción en base a una modificación de la ley que ofrece mayores garantías al propietario en este proceso.

Con todo, la Sareb asume en base a las alegaciones formuladas que resulta inviable finalizar las obras de un centro comercial de este tamaño, diseñado en una coyuntura económica muy diferente y que, por otra parte, los objetivos de la sociedad creada para ayudar al saneamiento del sistema financiero español tras la última crisis pasan por «desinvertir» y no por finalizar centros comerciales «de esta envergadura». La Sareb muestra su total disposición a cumplir las diferentes órdenes de ejecución dictadas por el ayuntamiento para garantizar la seguridad en una obra inacabada y destaca que todos sus esfuerzos están centrados en la comercialización de este activo.

«Que cumplan con su deber»

El ayuntamiento ha asumido parcialmente las alegaciones de la Sareb, dejando sin efecto la inscripción en el registro municipal, y si bien alega que resulta comprensible que el proyecto inicial resulte inviable en estos momentos, advierte de que la construcción del centro comercial no es el único proyecto que podría desarrollarse en este inmueble inacabado. El gobierno municipal señala que la única pretensión del ayuntamiento es que los propietarios de solares e inmuebles cumplan el deber que les impone la ley y, a su vez, evitar el impacto negativo que desde el punto de vista paisajístico y ambiental ofrece en la actualidad. Con todo, y ante el reconocimiento de la Sareb de que sólo contempla la venta del inmueble, el consistorio recuerda que se puede tramitar una nueva orden de edificación y la inclusión del inmueble en el registro municipal.

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