Uno de los tramos del Barxeta a su paso por Carcaixent ofrece ahora su mejor versión. La empresa Schweppes Suntory España ha concluido los trabajos de recuperación del barranco que se engloban en su estrategia de regeneración de ecosistemas acuáticos.
Según explicó ayer la propia mercantil, estas obras se han desarrollado en colaboración con Ecodes, en dos fases: la primera, iniciada a finales de 2019, tuvo como objetivo la preparación del terreno con el desescombro y la retirada de caña. Y, en segundo lugar, las actuaciones de revegetación y ordenación social del espacio, que acaban de terminar recientemente.
«El objetivo principal de las obras en el barranco de Barxeta ha sido el de mejorar los sistemas acuáticos de esta zona del Júcar, así como favorecer la biodiversidad, crear zonas de refugio para la fauna, recuperar la riqueza socioambiental del entorno y favorecer el respeto y concienciación de la ciudadanía», aseguraron portavoces de Schweppes. Asimismo, destacaron que se ha trabajado en un proyecto transversal que permita la convivencia equilibrada de personas, fauna y flora.
En esta línea, se ha llevado a cabo un arduo trabajo de eliminación de cañaverales y residuos que impedían un apropiado uso del espacio, tras lo que se ha procedido a la revegetación a lo largo de la ribera del Xúquer en torno a Carcaixent. Para terminar con la adecuación y mejora de la zona, se han realizado trabajos relacionados con el uso social de la zona: la construcción de caminos y una pasarela sobre el barranco, instalación de señalética y la delimitación de zonas con elementos naturales.
