Durante julio y agosto una veintena de niños de Alzira participan en un programa de formación y refuerzo educativo, que se desarrolla en el Centro de Participación Ciudadana (CPC) de L'Alquerieta gracias a un proyecto conjunto del ayuntamiento y la Fundación Cepaim.

Son alumnos que cursan primaria y secundaria de diferentes nacionalidades y están sometidos a las más estrictas medidas sanitarias para prevenir la Covid-19. El proyecto persigue facilitar a las familias, a través del apoyo y el seguimiento educativo, las diferentes tareas que demandan los centros educativos para realizar en verano.

La iniciativa promueve la igualdad, la diversidad, el respeto y la convivencia son ejes fundamentales que comulgan con la comunidad, la inclusión y la cohesión social. Los profesionales detectan las necesidades de cada menor y trabajan no solo el refuerzo educativo sino también el lado emocional como parte fundamental para afianzar los ejes y objetivos del proyecto.

Otro eje fundamental es la comunicación con las familias. Se pretende que sientan que forman parte del proyecto puesto que su implicación facilitará el proceso. Son varias las familias que han agradecido esta iniciativa, pues la consideran un gran apoyo en el proceso de enseñanza-aprendizaje de sus hijos.