El cuentacuentos Llorenç Giménez tendrá finalmente una placa de recuerdo en el mirador que Alzira ha abierto al Xúquer. La pandemia del coronavirus había demorado la instalación de la misma junto a un olivo casi centenario que se plantó en febrero, con motivo del día del árbol, aunque ésta se colocó ayer «para dejar constancia de su aportación al ámbito educativo y social».

Se trata de una pieza de cerámica, que ha trabajado Jaume Romero, profesor de cerámica de la Escola Municipal d'Arts Plàstiques, que ha quedado integrada en uno de los bloques de piedra del antiguo puente de Sant Bernat. El alcalde de Alzira, Diego Gómez; el edil de Cultura, Alfred Aranda, y el concejal de Medio Ambiente, visitaron ayer el mirador y el olivo ante el que se ha colocado este recuerdo póstumo al popular cuentacuentos. Aranda apuntó que si la coyuntura lo permite, el 17 de octubre se organizará una sesión de cuentacuentos familiar y se presenta un cuaderno didáctico.