Dos becerros de una ganadería de Alfarp vagan sin control por el término municipal desde primera hora de la tarde del lunes tras fugarse de los corrales junto a una tercera res que pudo ser localizada y recuperada por los pastores ese mismo día. El Ayuntamiento de Alfarp emitió un bando ayer en el que alertaba a la población de la presencia de estos dos toros jóvenes, de entre 80 y 100 kilos cada uno, sueltos por la zona del Camí de Alginet y el Camí Sueca. En la tarde de ayer se incorporó una unidad del Seprona de la Guardia Civil al rastreo por el término municipal que, al cierre de esta edición, había localizado a los animales en las inmediaciones de la explotación. La perspectiva de los agentes y la ganadería era poder reconducirlos a los corrales antes de acabar el día.

El alcalde de Alfarp, Santi Cervera, alertó de que no es la primera vez que se produce un incidente de estas características que altera la tranquilidad en el pueblo y señaló que se había dado el aviso a la población para evitar que cualquier agricultor o persona que tuviera previsto salir a caminar o con la bici se diera de bruces con los toros. «No sé como se han escapado, no es normal, no se pueden escapar así como así, o las vallas no son las que toca o las medidas de seguridad no son las adecuadas, o falta mantenimiento», expresó el alcalde molesto con esta situación, mientras señalaba que el ayuntamiento «ya ha tomado medidas».

Cervera detalló que un agricultor le alertó el lunes por la tarde de la presencia de un toro suelto aunque, de forma inmediata, le informó también de que había llegado el camión de la ganadería y lo había cargado. Lo que parecía una buena noticia se complicó poco después cuando el único agente de la Policía Local con que cuenta Alfarp le informó de que no era el único toro que se había escapado al ganadero y que todavía quedaban otros dos sueltos.

El alcalde comentó que en la misma tarde del lunes se comunicó el incidente tanto al 112 como al Seprona mientras el ganadero sacaba al manso para tratar de reconducir a las reses, pero no fue hasta ayer por la tarde cuando acudió la patrulla de la Guardia Civil. El alcalde comentó que estos animales no suelen acercarse a un núcleo urbano, aunque al aire libre, «no son fáciles de coger». Si bien por momentos se desconocía el paradero de los toros, comentó el munícipe, la Guardia Civil informó ya avanzada la tarde de que habían sido localizados.