La protectora Esperança Animal de Cullera, una asociación de voluntarios sin ánimo de lucro, ha decidido no aceptar ni recoger más perros o gatos abandonados «por no tener refugio y escasear las casas de acogida». Sus promotores lamentan que muchas veces tienen que pagar una residencia «ante la imposibilidad de tener un sitio donde dejar al animal». En lo que va de año ya llevan contabilizados cien animales rescatados y casi 70 adopciones.

La entidad ha acumulado una deuda de más de 3.000 euros en veterinarios en lo que va de año y ya no puede endeudarse más. «De esos 3.000 €, gracias a las donaciones, hemos podido dar 1.000 pero aún queda mucho por liquidar». La asociación ve la situación muy preocupante, «Tenemos perros con leishmania que necesitan tratamiento, gatos con inmuno, nuestros animales que no salen adoptados y están en casas de acogida comen y hay que hacer frente a ese gasto», precisan.

Los voluntarios reclaman a vecinos que entran a los supermercaos que les regalen pienso, pero las necesidades se acumulan: los animales también necesitan ser vacunados y desparasitados. «Pero llega un momento que ya no puedes más y tienes que parar porque si no todo se viene abajo», alegan.

Esperança Animal se mantiene económicamente con rifas, loterías, calendarios y, sobre todo, donaciones. La pandemia tampoco ha ayudado al impedir la organización de colectas. «Este año es el que más gatitos han aparecido abandonados o tirados a un contenedor de basura. Ayudamos en la medida de nuestras posibilidades a las personas que alimentan colonias de gatos, que se desviven por ellos y a cambio reciben amenazas de quien no le gustan los animales. Si la gente esterilizara o castrara, no pasaría», subrayan.

La entidad estima que el ayuntamiento debería regular las colonias de gatos y promover esterilizaciones de gatas callejeras, como ocurre en muchos municipios. Los veterinarios locales les ayudan aplicando precios más reducidos en los animales rescatados pero todo tiene un límite «y este año ya se ha superado».

Los perros y gatos que rescatan los dan en adopción a familias concienciadas. La protectora anima a los ciudadanos a colaborar con ella «para conseguir entre todos rescatar de la calle a los animales abandonados y evitar su sufrimiento, o que acaben en manos de la perrera, donde a buen seguro morirán», intuyen.

El ayuntamiento comienza a censar a las mascotas

El Ayuntamiento de Cullera ha abierto el trámite para registrar a los animales de compañía. El objetivo es identificar a los perros, gatos y équidos «para su regulación y protección». Los propietarios de perros o animales potencialmente peligrosos tendrán que inscribirse en un espacio específico. Este censo ayudará a comunicar la desaparición, robo, abandono o cualquier otra circunstancia. El siguiente paso será censar el ADN de los animales para identificar el origen de los excrementos en la vía pública y perseguir las conductas incívicas. El ayuntamiento facilitará un ‘kit’ de limpieza a los mil primeros inscritos que incluye bolsas y un botellín para llevar el agua con jabón o vinagre. J.G.