La pandemia apenas ha influido en la subasta del coto de aves acuáticas de Cullera. La incontenida ilusión de los aficionados y las ganas de mantener la tradición pese a las restricciones impuestas han permitido que la subasta celebrada el domingo se cerrara con una recaudación de 38.500 euros. La cuantía se encuentra un poco por debajo respecto al año pasado – cuando la recaudación fue de 41.450 euros – pero «muy por encima de lo que estábamos acostumbrados en la época de la crisis donde nunca llegábamos a los 30.000 euros», según ha subrayado el concejal responsable, Salva Tortajada.

Todas las replazas que salían a subata lograron adjudicarse. Por la más cotizada de este año (la número 13) se han pagado 2.950 euros. La segunda (la 17) se adjudicó por 2.650 euros, mientras que la licitación para la 3 y la 19 fue idéntica: por ambas se desembolsaron 2.500 euros. En el lado opuesto, la replaza 25 fue la menos cotizada, ya que se saldó con apenas 400 euros. Y por un poco más, 500 euros, se encontró comprador la 7 y la 29.

En la temporada 2015/2016 se consiguieron con 38.150 euros unas cifras similares a las de este año. El siguiente año cayó hasta los 32.750 euros, pero seguidamente vendrían dos temporadas en las que de manera consecutiva se batieron récords históricos de recaudación: en la temporada 2017/2018 disparándose a los 47.750 euros y en la 2018/2019 llegando a la más alta de la historia del coto con 50.450 euros.

El año pasado la recaudación también superó la barrera de los 40.000 euros y, a pesar de venir de una temporada mala tal como señalaban los propios cazadores, se consiguieron 41.450 euros.

El coto de Cullera se subasta desde 1882 y este año la tirada inicial tendrá lugar el 28 de noviembre. La temporada contará con ocho tiradas entre noviembre, diciembre y enero. A la tirada inicial le seguirán cuatro sábados consecutivos de diciembre: los días 5, el 12, el 19 y el 26. Y para el año nuevo están marcadas tres fechas más: el 2, el 9 y el 16 de enero en que se concluirá la temporada.