Salud Pública alertó el sábado de un repunte de positivos por coronavirus tanto en La Pobla Llarga como en Rafelguaraf, lo que llevó a ambos ayuntamientos a solicitar a sus vecinos por la redes sociales la máxima prudencia para cortar la cadena de contagios. En el caso de la Pobla, las autoridades sanitarias advertían de cuatro positivos en un día cuando la actualización del viernes computaba cinco casos en los últimos catorce días, mientras que contabilizaban tres contagios en Rafelguaraf, donde en las últimas dos semanas no se había registrado ningún caso.
El ayuntamiento alertó de lo que se presumía un brote y difundió una serie de recomendaciones para recordar a los vecinos que deben cumplir las medidas de seguridad en reuniones familiares y sociales. No obstante, la alcaldesa de Rafelguaraf, Rafaela Aliaga, señaló ayer que con posterioridad se ha confirmado que se trata de personas empadronadas en el municipio pero que no residen habitualmente en Rafelguaraf, lo que de algún modo ha supuesto un respiro. «Te da más tranquilidad porque justamente el día anterior había salido la estadística sin ningún caso», indicó.
La alcaldesa de La Pobla, Neus Garrigues, no ocultaba ayer su preocupación por este repunte de casos a las puertas de las «no fiestas» que, en base al programa suspendido, se hubieran celebrado entre el 8 y el 12 de octubre. «Mantuvimos una reunión con la gerencia del hospital y la junta de moros y cristianos, que ha entendido la situación y ha remitido un comunicado a todas las comparsas. Nos preocupan las reuniones sociales que pueda haber estos días de no fiestas, tengo muy presente lo sucedido en Benigànim y en Carlet porque los contactos vienen por las relaciones sociales», indicó.
Garrigues dijo tener conocimiento de que ayer se estaban realizando pruebas PCR a personas que han podido tener un contacto estrecho con algunos de los afectados en base a los rastreos realizados, por lo que dijo estar a la expectiva por conocer si la cadena de infecciones se frena en esos cuatro contagios o aparece alguno más. Con todo, indicó que en base a la información de que dispone, todo indica que se trata de casos aislados y no de un brote. En el mensaje difundo por las redes sociales, el gobierno municipal expresa su preocupación por la aparición de «un número importante de positivos» que podría derivar en más casos, por lo que solicita a los vecinos «prudencia, prevención y precaución» tanto en reuniones familiares como sociales y, en la medida que se pueda, que se reduzcan el número de contactos.
Rafaela Aliaga comentó que también se estaban realizando pruebas PCR a algunos vecinos que han podido estar en contacto con los infectados. El ayuntamiento tenía previsto que un tractor atomizador saliera anoche a desinfectar todas las calles, si bien la alcaldesa defendió que se trata de una práctica que se viene repitiendo de forma periódica desde julio.
