El área de Salud Pública alertó ayer de la proliferación de contagios en reuniones sociales en las que se incumplen las restricciones de aforo máximo permitido. Esta es una de las claves del aumento de positivos de los últimos días. La curva vuelve a crecer tras el puente de diciembre como ya ocurriera en octubre. Con las fiestas navideñas a la vuelta de la esquina, se incrementa la preocupación de los ayuntamientos, que insisten de manera reiterada en la necesidad de seguir a rajatabla cada instrucción dada por las autoridades sanitarias para frenar el avance de la covid-19.
«Poco a poco empiezan a notarse los efectos del puente. El número de contagios crece», manifestaron fuentes de Salud Pública a Levante-EMV. Como ocurriera en octubre, los positivos van al alza tras un fin de semana más largo de lo normal y que, tradicionalmente, ha sido sinónimo de encuentros con amigos y familiares. «Si el ritmo sigue al alza, la Navidad se puede ver comprometida porque no nos podemos permitir volver a aquellos niveles», añadieron.
Uno de los focos de transmisión más importantes del coronavirus se encuentra, precisamente, en las reuniones con amigos o familiares. La estadística no miente y saca a relucir una realidad preocupante: las medidas sanitarias se incumplen. «Si continúan apareciendo brotes sociales en nuestros municipios con siete, ocho o nueve infectados, es porque se ha violado la restricción que limita las reuniones privadas a un máximo de seis personas», destacaron desde Salud Pública, que apuntaron que, previsiblemente, las consecuencias de estos nuevos contagios tendrán su repercusión en la ocupación hospitalaria a partir de los próximos días. «El principal problema que tenemos es que el mensaje no llega a donde debe llegar», añadieron los responsables sanitarios.
Cercanía de la Navidad
De entre los municipios enmarcados en el área de salud de la Ribera, en estos momentos, Algemesí y Benifaió son los dos con un incremento mayor de positivos de coronavirus en los últimos días. «En el caso de Algemesí, se han estancado en números muy elevados que ahora van al alza. Si el ritmo no baja quiere decir que existe transmisión comunitaria y se ha perdido el rastro de los contagios», indicaron las mismas fuentes.
No obstante, la tendencia al alza es generalizada. El Ayuntamiento de Alzira confirmó, también ayer, que la incidencia acumulada ha crecido en una semana al pasar de 293 a 354 casos por cada 100.000 habitantes. Tras 39 positivos en tan solo tres días, la ciudad alcanzó los 162 casos activos. «Se acerca la Navidad y este año tenemos que ser conscientes de que deben ser unas fiestas diferentes en las que cumplir rigurosamente las medidas sanitarias», proclamó la concejala de Salud, Gemma Alós. Por su parte, el alcalde, Diego Gómez, insistió en la idea de que «las mejores fiestas son las que se pasarán en casa, controlando los contactos y reduciendo al máximo las reuniones».
Sin relajación
También L’Alcúdia dio a conocer sus cifras recientes, con 55 casos en catorce días, lo que se traduce en una incidencia acumulada de 451 cada 100.000 habitantes. «No podemos tomar estas cifras como normales y relajarnos. La OMS establece el estándar de normalidad cuando la prevalencia cae por debajo de los 25 casos por cada 100.000 habitantes», apuntó al respecto el alcalde de la localidad, Andreu Salom.
