La comarca supera, prácticamente a diario, su récord de contagios de coronavirus. Como era de esperar, esto supone también registros inauditos de mortalidad. Mientras la actualización de datos ofrecida por el portal de la Conselleria de Sanitat sumaba siete nuevos fallecidos el martes, ayer añadió, de golpe, dieciséis más, la cifra más alta hasta la fecha.

Con los contagios disparados en todos los municipios, multiplicando en más de un caso por diez el índice máximo, establecido por la OMS en 250 positivos por cada 100.000 habitantes, era previsible que a mayor incidencia, aumentaran las víctimas mortales. La Covid se ha cobrado la vida de otros cinco vecinos de Algemesí, el municipio con más muertes desde el inicio de la pandemia: 24. También se han notificado fallecimientos en las siguientes localidades: Alberic, Alzira, Carcaixent (3), Càrcer, Carlet, Corbera, L’Énova y Sueca (2). De ese modo, ya son 145 las defunciones registradas por Covid en la comarca.

La estadística oficial añade, asimismo, 1.565 contagios más, repartidos entre casi todas las localidades. De hecho, solo Alcàntera, Benimodo, Benimuslem, Gavarda, Massalavés y Sellent no sumaban casos nuevos. En el polo opuesto se encontraban aquellos municipios que lideran los nuevos casos. Se han sumado 201 a Alzira, 187 a Algemesí, 165 a Cullera, 149 a Sueca y 136 a Carcaixent. La situación de la localidad turística es la más llamativa, ya que, en base a estos datos, prácticamente la mitad de los contagios que se han producido en Cullera se han registrado en las últimas semanas.

El portal estadístico -que no muestra las mismas cifras que Salut Pública transmite diariamente a los ayuntamientos, ya que los datos tardan en procesarse y, en algunos casos, se reasignan contagios- situaba en más de 3.400 los casos activos en la comarca. Si la Ribera tiene 300.000 habitantes, claramente se supera la barrera del millar de casos por cada cien mil.

Los ayuntamientos de la comarca han insistido, en los últimos días, en la necesidad de aplicar medidas más duras y restrictivas, ya que el aumento de contagios no cesa y ven peligrar la situación del sistema sanitario público, que podría colapsar si la tendencia no se revierte. Los alcaldes han reclamado, incluso, el autoconfinamiento a sus vecinos, a quienes aconsejan salir de casa únicamente para trabajar y realizar la compra, reduciendo al máximo cualquier contacto de tipo social.

Agentes de policía blindan Guadassuar

Los ayuntamientos de L’Alcúdia y Guadassuar anunciaron ayer un control más férreo de la policía en sus municipios con el objetivo de garantizar que los vecinos cumplen con las restricciones sanitarias.

En el caso de Guadassuar, las patrullas blindarán las entradas y salidas, puesto que el municipio se encuentra confinado perimetralmente. La Policía Local cuenta con el apoyo logístico de la Guardia Civil y también se ha incorporado recientemente la Policía Nacional, que vigilarán las entradas y salidas de la localidad. Únicamente se permiten para asistir al trabajo, la escuela o centros sanitarios. También para regresar a la residencia habitual, asistir a personas dependientes o realizar trámites administrativos urgentes.

Por su parte, el consistorio alcudiano puso ayer en marcha un nuevo dispositivo policial dedicado exclusivamente al cumplimiento de las normas anticovid. En concreto, una patrulla municipal se encargará de este cometido. Dos agentes, que irán sin identificativos de policía, denunciarán a todas aquellas personas que incumplan las medidas sanitarias, ya sea por el uso de mascarilla, por el distanciamiento social o por estar fumando en las terrazas. También velarán por el cumplimiento de los aforos en los establecimientos. «Todos los vecinos conocen las normas para prevenir contagios y la mayoría las cumple, pero hay que controlar a los que todavía no lo hacen», manifestó el alcalde.

Fortaleny y Càrcer disparan la incidencia por encima de 3.300

Las alarmas se han encendido en Fortaleny y Càrcer, cuyos ayuntamientos dieron a conocer ayer que cuentan con una incidencia acumulada superior a los 3.300 casos por cada cien mil habitantes. El consistorio que dirige Josep Botella envió una petición a la conselleria de Sanitat para que se confine perimetralmente el municipio. El de Fortaleny también hizo lo propio en su momento. En ambos casos, se recomienda a los vecinos permanecer en sus hogares y solo salir a realizar tareas que sean de máxima necesidad. «Si no tienes el virus, no salgas a buscarlo. Y si lo tienes, no salgas a repartirlo», es uno de los mensajes que más se repite estos días para concienciar a la población ante el aumento generalizado de contagios.