El Hospital Universitario de la Ribera ha puesto en marcha una serie de sesiones dirigidas a profesionales, con el fin de abordar con ellos los efectos psicológicos derivados de la pandemia de coronavirus. Según explicó ayer el centro asistencial alzireño, se trata de reuniones interactivas con las que se pretende identificar los aspectos emocionales negativos que pueden aparecer vinculados a la crisis actual, así como reforzar y dotar de estrategias y recursos a los profesionales para que puedan hacer frente a estas emociones.

Según destacó Mónica Portillo, psicóloga clínica del hospital de Alzira, «en la situación actual, los profesionales sanitarios se encuentran sometidos a un alto grado de exigencia en todos los aspectos, tanto funcionales como emocionales, generado por ellos mismos, por sus compañeros y por los pacientes que atienden».

«Ello desemboca en situaciones de estrés y malestar, identificadas o no, que pueden afectar y mermar el bienestar personal y del equipo, así como el bienestar social y familiar del profesional», añadió. De ese modo, se puede identificar e interpretar los síntomas de estas situaciones, las preocupaciones más frecuentes, estrategias de afrontamiento conductuales, cognitivas y de relajación-meditación, serán algunos de los aspectos que se tratarán en estas sesiones, que también permitirán «generar un espacio de respiro emocional y de apoyo a nivel de equipo», concluyó Portillo.