A veces cuando menos lo esperas, y más en este tiempo en el que la pandemia ha animado a publicar muchos libros de vivencias, de repente aparece una novedad editorial interesante. «Aquí ya no queda nadie», un libro marcado por la sencillez de sus versos, la rapidez de su lectura y la experiencia escondida entre sus palabras, uno de esos libros con los que la autora busca «la implicación del lector». Un libro original, con fuerza, de fácil lectura a la vez que intenso, personal, pero sobretodo íntimo.

Un libro de poesía con el que debuta en este género la cullerense Matilde Gordero Moreno. Hasta ahora ha tenido una gran acogida, aunque todavía no ha sido presentado formalmente. La propia autora y la editorial se plantean presentarlo telemáticamente y después, cuando la pandemia dé una tregua, darlo a conocer en diferentes lugares estratégicos para acercarlo al gran público. 

El libro es fruto de un atracón lírico, con influencias de Piedad Bonett, Gioconda Belli, Flavia Company, Rubén Darío, Joaquín Pasos y Leila Guerriero. También obdece «a la necesidad de que las heridas cicatricen».

Su estado queda patente en sus versos: «Hay días en los que parece imposible que pueda existir el invierno. Hay días en que te hablan de ausencias y descubres que no sabes nada sobre ausencias». Los versos recorren, entre otros lugares, Cuba, Nicaragua y Barcelona. Fueron escritos a lo largo del año que sucedió a una ruptura, a la que sucedieron muchas más. El libro, según la propia autora, «consta de cuatro capítulos que retratan cuatro estados de ánimo de un período de duelo... superado, o no, a fuerza de vivir».

Autora polifacética 

Matilde Gordero-Moreno es periodista, escritora y consultora de comunicación. Ha colaborado con muchos medios digitales. En La Veu publicó sus escritos impresionistas y costumbristas sobre su pueblo natal y diarios de viaje. Ha estudiado narrativa, cuento y microrrelato en la Escola d’Escriptura de l’Ateneu Barcelonès.

La portada del libro es obra de Diana Vicedo, una artista afincada en Cullera que el año pasado resultó ganadora del cartel anunciador de las fiestas 2020, que por la pandemia no pudo ver la luz más allá de las redes sociales.