La Junta de Hermandades y Cofradías de la Semana Santa de Alzira formalizará el lunes la suspensión de todas las procesiones y actos de calle que conforman el programa festivo, incluido el concurso de doseles, al persistir la alerta sanitaria provocada por la pandemia del coronavirus.

La anulación de la gran mayoría de actividades es la propuesta que la directiva que encabeza Vicent Fábregues trasladará a los representantes de las cofradías y que, en la práctica, supone suspender por tercer año consecutivo el principal desfile de la Semana Santa, la procesión del Santo Entierro. La lluvia impidió su celebración en 2019 mientras que la eclosión de la pandemia ya provocó el año pasado que se dejaran de celebrar las procesiones y desfiles. Las celebraciones más multitudinarias de la Semana Santa de Alzira, que está declarada Fiesta de Interés Turístico Nacional, deberán esperar hasta 2022.

«No vamos a poner en riesgo en ningún momento la salud de la gente, tanto de los cofrades como de los no cofrades», comentó ayer Fábregues, a la espera de que la junta convocada para el lunes refrende el acuerdo de suspender la mayor parte de los actos. El objetivo no es otro que evitar cualquier concentración de cofrades o espectadores que pueda propiciar contagios por Covid-19. Sólo se mantendrán las celebraciones que las cofradías realizan en el interior de las iglesias, cumpliendo las limitaciones de aforo que establezcan las autoridades sanitarias.

Vicent Fábregues comentó que la imposibilidad de celebrar este año la Semana Santa en la calle da lugar a una situación insólita y comentó que «lo más doloroso» son estos tres años sin que los cofrades puedan participar en la procesión general del Santo Entierro.

Guadassuar suspende desfiles

Por otra parte, la Junta Central de Germandats i Confraries de Guadassuar también anunció ayer la suspensión de todas las procesiones y desfiles, incluida la tamborada general prevista para el viernes 2 de abril, tras la reunión mantenida días atrás por los representantes de la junta con el concejal de Turismo, Ferran Barberà, y el párroco, Juan Sivera.

El acuerdo de suspensión fue unánime en base a las recomendaciones de la Conselleria de Sanitat y del propio Arzobispado de València, «con la firme intención de limitar la propagación y contagios de la Covid-19».

Únicamente se mantiene en el programa oficial de actos del pregón, previsto para el Viernes de Dolores -26 de marzo-, y el concierto de Semana Santa, que tendrá lugar el sábado 27, según confirmó ayer Barberà, al considerar que se trata de actos que se pueden celebrar con seguridad. El edil también recordó que en 2019 llovió en Guadassuar prácticamente todos los días de Semana Santa por lo que será el tercer año «en blanco» para los cofrades.