Las deudas del antiguo Hospital Municipal Santa Lucía que el Ayuntamiento de Alzira transfirió a la Generalitat en el año 1994 todavía colean, al menos sobre el papel. La Tesorería General de la Seguridad Social ha atendido de nuevo la petición del consistorio al conceder otro año de carencia y ampliar la moratoria de forma que, en caso de que tuviera que hacer efectivos los pagos, se derivan hasta diciembre de 2031.
Se trata de un procedimiento que se repite todos los años desde que el consistorio se acogiera por primera vez en 1996 a una disposición de la Ley de Presupuestos Generales del Estado que permitía posponer el pago de deudas a la Seguridad Social derivadas de instituciones sanitarias dependientes de las Administraciones Públicas o sin ánimo de lucro, con la expectativa última de que en algún momento se condone la deuda, según reconoció el concejal de Hacienda, Albert Furió. En el caso del consistorio alcireño ésta asciende a 294.590 euros.
El Hospital Santa Lucía era un servicio de titularidad municipal que lastraba las arcas municipales debido al elevado coste que representaba, por lo que las autoridades municipales negociaron su transferencia a la Conselleria de Sanitat. El proceso fue complejo y tras diferentes demoras se pudo formalizar en el año 1994, con efectos retroactivos desde el 1 de enero de ese ejercicio. El déficit acumulado por el hospital ascendía en ese momento a 170 millones de pesetas.
El ayuntamiento negoció desde el primer momento el aplazamiento del pago de la deuda que mantenía con la Seguridad Social y, desde entonces, se han prorrogado de forma sucesiva los vencimientos previstos. De ese modo, el primer plazo de carencia de tres años se ha ampliado ya a 27, mientras que el período para amortizar el capital en los diez años siguientes se ha retrasado al mismo ritmo.
El cuatro de amortización de la deuda si finalment el consistorio tuviera que hacer frente a la misma señala que el mes de diciembre de 2022 como fecha deun primer pago próximo a los 30.000 euros mientras que el resto de la deuda se abonaría en pagos anuales que se demorarían hasta diciembre de 2031, según la resolución de la Seguridad Social de la que se dio cuenta en el último pleno celebrado por la corporación.
