Alzira celebrará las Fallas del 2 al 5 de septiembre, aunque sólo nueve comisiones planten sus monumentos. La asamblea de presidentes celebrada anoche permitió rebajar la tensión creciente de los últimos días aunque, en principio, no modificó la negativa de las otras 26 comisiones a celebrar las fiestas. Eso sí, si así lo deciden, todas tendrán la posibilidad de abrir los casales y pedir permiso de ocupación de vía pública para actividades de forma individual.

Son las principales conclusiones de una asamblea tensa por momentos en la que el alcalde de Alzira, Diego Gómez, llegó a anunciar que si se mantenía la negativa de las 26 comisiones recomendaría que no se celebraran los festejos y el presidente de la Junta Local Fallera, Jaume Bohigues, pidió a las comisiones que le ratificaran en el cargo para continuar. Su petición no se tuvo en consideración después de que la semana anterior se acordara la continuidad de todos los cargos tanto representativos como ejecutivos hasta 2022, aunque Bohigues anunció que volverá a solicitarlo en septiembre. Era los últimos coletazos de unas jornadas marcadas por la crispación, que han provocado un enorme desgaste en la junta, mientras las 35 comisiones se posicionaban entre alguna de las tres alternativas que había sobre la mesa.

La votación dio el resultado que ya era conocido: nueve fallas -las tres de la Sección Especial, El Mercat, Plaça Major y Camí Nou, además de Doctor Ferran, Pintor Andreu, Germanies, Sant Andreu, Sagrada Familia y Hernán Cortés- apostaban por plantar monumento y celebrar las fiestas mientras que las 26 restantes comunicaban su decisión de no plantar aunque no pudieran realizar ningún tipo de actividad.

El alcalde de Alzira admitió que se había generado una división no deseada y, en aras al consenso, abrió una tercera vía, que ya de entrada pidió que no se votara y que incluso estuvo a punto de retirar ante el cariz que por momentos tomaba el debate. La propuesta consistía en abrir la puerta a que todas las fallas pudieran celebrar actividades en sus casales aunque no plantaran monumento -garantizaba la apertura de los casales y el permiso de ocupación de vía pública- y anunciaba además la disposición del ayuntamiento a arbitrar unas ayudas postcovid para todas las comisiones en 2022, aunque para ello reclamó un acuerdo de solidaridad.

La advertencia de que con ese escenario el ayuntamiento recomendaría no celebrar las Fallas en septiembre provocó varias intervenciones de comisiones que habían decidido no plantar en favor de que las nueve fallas que sí querían pudieran hacerlo. La oferta del ayuntamiento deja la puerta abierta a que todas las comisiones puedan celebrar actividades en sus casales del 2 al 5 de septiembre e incluso a que puedan reconsiderar la decisión de no plantar monumento, aunque un presidente recurrió al famoso «no es no» de Pedro Sánchez para dejar claro que no iba a revisar el acuerdo adoptado mientras otros lamentaban que esta propuesta no se hubiera contemplado en la última asamblea.