Casi a la vez que las fallas de Alzira decidían mantener la celebración de las fiestas entre el 2 y el 5 de septiembre pese a la negativa de 26 de las 35 comisiones de la ciudad a participar -sólo nueve sacarán sus monumentos a la calle-, las de Algemesí acordaban por unanimidad cancelar definitivamente las fiestas de 2021, cerrar el ejercicio y empezar a trabajar en las Fallas de 2022. La Junta Local Fallera de Sueca, por su parte, ha decidido trasladar las celebraciones al puente de octubre, si bien ha dado libertad a las fallas para plantar o no los monumentos, mientras que sigue en el aire la decisión de las comisiones de Carcaixent y Cullera. En el primer caso, la JLF ha convocado para mañana la asamblea en que los presidentes de las comisiones deben decidir si se celebran fiestas en septiembre o no, mientras que en el caso de Cullera la reunión está prevista para la próxima semana.
Con todo, Algemesí se convierte en la primera ciudad de la Ribera de entre las de mayor población que decide suspender las fiestas, según comunicó la Federació de Falles d’Algemesí, al tiempo que anunciaba el acuerdo de mantener los cargos de representación de cada una de las comisiones así como las falleras mayores de la ciudad y sus cortes de honor. La cancelación de las Fallas cuenta con el respaldo del ayuntamiento. La JLF y algunas comisiones habían asumido la dificultad de encontrar encaje para las Fallas en el mes de septiembre en Algemesí, donde si las circunstancias lo permiten manda la Festa de la Mare de Déu de la Salud y la Setmana Taurina, y lo complicado que, desde el punta de vista del coste económico, podría suponer la celebración de las fiestas de dos veces en un intervalo de seis meses.
El comunicado de la Federació de Falles que anuncia la cancelación expresa la voluntad tanto de la Junta Local Fallera como de las once comisiones de la ciudad de trabajar por «fomentar y ayudar» a todos los sectores que trabajan por la fiesta «en cada uno de los actos que se puedan realizar en este nuevo ejercicio que comienza».
La autorización de las autoridades sanitarias para celebrar las Fallas de 2021 en el último trimestre del año provocará que, como es habitual, el calendario festivo se extienda en la Ribera mucho más allá de la semana propia de Sant Josep, o la que en este caso ha marcado València ciudad como referencia en la actual coyuntura sanitaria, a la que se ha adherido Alzira.
Cabe recordar que la Junta Local Fallera de Turís, que tradicionalmente celebra las fiestas después de Sant Josep, ha fijado para este año un calendario entre el 16 y el 19 de septiembre. La fiesta se trasladará en octubre a las calles de Sueca aprovechando el puente del día de la Hispanidad y también está previsto que en octubre se puedan celebras las Fallas en la localidad de Carlet, a la espera de conocer la decisión que tomen en los próximos días tanto las comisiones falleras de Carcaixent como las de Cullera.
Alzira agradece el esfuerzo para superar la crispación
La JLF de Alzira agradeció ayer a todas las comisiones el «esfuerzo y la comprensión» mostrada en la asamblea del lunes tras la crispación vivida en las horas previas, en la que se acordó que habrá fallas en septiembre con las nueve que han decidido plantar mientras que las otras podrán abrir sus casales aunque no participar en los actos que organice la JLF ni en pasacalles.
