Los datos del primer semestre de 2021 reflejan cierta ralentización en el aumento de la superficie de cultivo certificada como ecológica, especialmente si se tienen en cuenta algunos precedentes con repuntes de hasta el 70 %, aunque un análisis más amplio de las estadísticas del CAECV revela que se trata de una tendencia sostenida en el tiempo desde que los primeros agricultores optaron por este tipo de cultivos en busca de mercados que habitualmente ofrecen una mayor rentabilidad.
El Comité Certificador tenía registradas en 2015 en la Ribera un total de 385 hectáreas de cultivos ecológicos, una superficie que prácticamente se ha triplicado en apenas cinco años y medio en base a la nueva actualización, en la que el mismo organismo contabilizada 1.122 hectáreas.
La agricultura ecológica no ha dejado de ganar parcelas desde entonces, si bien el salto más significativo se produjo en el año 2019 al pasar de 570 hectáreas a 990, lo que representa un aumento del 73 %.
También el número de operadores -productores, empresas e importadores- ha crecido continuamente en este mismo período y ha pasado de los 126 que el CAECV tenía dados de alta en el año 2015 a los casi 300 que tiene registrados en el ecuador de 2021. En este caso, el repunte más relevante se produjo el año pasado, en plena pandemia, al pasar de los 214 operadores censados a finales de 2019 a 288 lo que representa un incremento del 34 %. En el primer semestre del año, en base a la estadísticas del Comité Certificador, únicamente se ha registrado un alta nueva que eleva a 289 el número de operadores.
