Los artista falleros siguen sufriendo las consecuencias de la pandemia. Y alguno de ellos, como el cullerense Joan Simón, ha intentado reinventarse en busca de ingresos. Ha confeccionado ninots a la carta para valencianos, pero también ha recibido ofertas de fuera. Una tienda de zapatos de Ceuta se interesó por la propuesta que tenía en su página web y le encargó ilustraciones de mascotas para su negocio. Los cuatro ninots ya sirven ahora para decorar el interior de la zapatería colgados al techo. Los muñecos fueron envueltos y acondicionados para no sufrir daños y llegaron en perfecto estado a la ciudad autónoma.
«Los artistas falleros vivimos de forma muy dura la crisis y hemos tenido que ampliar mucho nuestra imaginación para poder subsistir», alega Joan Simó
