Un empate contra el líder dejó con una cara de enfado máximo al entrenador de la UD Alzira. Dani Ponz quedó sorprendido por cómo su equipo había maniatado por completo al millonario Intercity y finalmente no pudo llevarse los tres puntos. «Los metimos en el área y se sentían muy superados»,era el resumen que hacía el técnico del Grau.
El partido empezó con un Alzira acaparando la posesión y obligando al Intercity a defenderse en su propio campo. Ya en el primer minuto Chema intentó un disparo lejano que atrapó sin problemas Manu Herrera. En el cinco, de nuevo Chema probó suerte para los azulgranas pero le salió desviado. Mucho más clara fue la siguiente, un minuto después, cuando el ex del Badalona se fue de sus defensores pero no acertó a ejecutar el mano a mano. El Intercity despertó y empezó a pisar campo alzirista pero sin poner en problemas la portería de Paweł. Al filo de la media hora llegó la siguiente ocasión y de nuevo fue azulgrana. El tiro de Marenyà desde 20 metros fue demasiado flojo. Las ocasiones ribereñas solo tenían un nombre, Chema Moreno.
En el descanso, Gustavo Siviero retiró a Cristian y dio entrada a Miguel Marí para reforzar el centro del campo con un 1-5-4-1. Cuando aún no había pasado un minuto, en un ataque alzireño por la izquierda, el rechace salió rebotado hacia la derecha, donde se encontraba Sesé dentro del área pero el disparo se fue al lateral de la red. Cuarenta y siete minutos tardó Intercity en tener la primera ocasión clara con un balón al área para Enzo, cuyo tiro fue rechazado a córner. Con defensa de cinco, era difícil sorprender al Intercity en estático, así que Juanma se animó a una cabalgada sorprendiendo desde atrás. Al final, un tiro raso fue a manos de Herrera.
El equipo alzirista, con seis veces menos presupuesto que el Intercity, siguió intentándolo arrancando los aplausos de sus aficionados. Dani Ponz quería darle al equipo más punch en ataque y dio entrada al delantero Germán y el extremo Zarzo por Traver y Sesé. Corría el minuto 25 cuando Zarzo enganchó un derechazo que obligó a Herrera a estirarse para desviar a córner. Ponz volvió a poner un poco más de salsa a su once con un medio ofensivo como Carlos Pérez por el defensivo Selfa. La insistencia de Binu tuvo su premio con la mejor ocasión alicantina, un disparo de Miguel Marí pero que no encontró palos. Sí prosiguió el empuje alzirista con un tiro de Beli alto y un cabezazo fuera a la salida de una falta lateral. Tras los últimos cambios, el partido murió con el empate inicial.
La RFEF confirmó ayer que el partido de Copa del Rey contra el CF Fuenlabrada se jugará el miércoles 1 de diciembre a las 20 h., por lo que no coincidirá con el de fútbol sala, que se disputará el martes.
