Aparcar en el entorno del centro hospitalario de Alzira es misión imposible, especialmente en horas punta. La falta de espacio suficiente para vehículos se ha convertido en un problema crónico que irrita a muchos pacientes, familiares e incluso profesionales.
Ni la anterior gestión privada del recinto ni la pública actual desde 2018 ha sabido dar solución a este problema que diariamente afecta no solo a los estacionamientos sino también al tráfico de la zona, caótico en ciertas horas, pues el colapso se produce por el gran número de conductores que dan contínuas vueltas al recinto y alrededores buscando un lugar donde dejar su vehículo.
El mismo efecto ocurría mientras la gestión del hospital corría a manos de la empresa Ribera Salud, época en la todo el espacio de parking dentro del recinto era de pago, lo que provocó que muchos conductores buscaran otras alternativas por los alrededores que empeoraron todavía más la circulación por la zona.
Pero la reversión del hospital, tampoco ha mejorado mucho las cosas. Pese a que el hospital liberó para pacientes y familiares la zona de pago, reservando el subterráneo, con 489 plazas, para los profesionales del centro (de 24:00 a 15:00 de lunes a viernes) y pacientes (de 15:00 a 24:00), no ha sido suficiente.
A esto cabe añadir las quejas de algunos profesionales sanitarios a la falta de control de las plazas que hacen que a veces ellos se queden sin sitio para aparcar sus vehículos.
El pleito de los terrenos
La diputada de Ciudadanos Sunsi Sanchis, preguntó en el parlamento valenciano por las posibles soluciones que se plantean para acabar con el problema de la falta de estacionamientos en el centro hospitalario y la consellera de Sanitat, Ana Barceló, le ha contestado que «no se puede ampliar el parking del hospital de Alzira por hallarse en estos momentos en medio de un pleito», por los terrenos donde estaba previsto ampliar el aparcamiento, pendiente de resolución por parte del Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana.
Solares privados
Dichos terrenos fueron adquiridos por la empresa Ribera Salud cuando todavía era la concesionaria de la gestión del hospital de La Ribera, tiempo antes a la reversión pública del servicio. Tras la misma, la empresa se negó rotundamente a que dichos terrenos entraran «en el lote de la reversión» por haberlos adquirido como empresa privada.
Con lo cual, la empresa alega que la titularidad de los mismos le pertenece a ella y no a la Administración Pública.
Falta de dinero
Asimismo, a principios del año 2019, la Diputación de Valencia anunció oficialmente la cesión de una parcela, cercana a la ubicación del centro hospitalario, con más de tres mil metros cuadrados de espacio, como lugar ideal para la construcción de un nuevo aparcamiento público, que si bien no hubiera resuelto totalmente el problema, sí lo hubiera aligerado al dotar de más plazas de acceso público y gratuito al hospital. Finalmente, el proyecto fue abandonado por el consistorio de la localidad por falta de recursos económicos para iniciar las obras.
