La estación meteorológica ubicada en el valle de la Casella cierra por segundo año consecutivo con el registro más alto de lluvias de la Comunitat Valenciana, en base a los datos de los cerca de 550 observatorios que conforman la red de la Asociación Valenciana de Meteorología (Avamet), que hasta ayer computaba en este punto un acumulado de 1.417 litros por metro cuadrado.
La cifra es ligeramente inferior a la del año anterior, aunque se sitúa muy cerca ya que entonces se recogieron en esta estación 1.484,8 l/m2. Era el primer año completo en que este joven observatorio ofrecía datos -entró en funcionamiento en abril de 2019- y vino a descubrir la capacidad de la Serra de Corbera para generar precipitaciones. Los registros parciales de 2019 ya apuntaban un régimen de lluvias superior al de La Murta, un valle contiguo también ubicado en el término municipal de Alzira del que sí se disponían registros, y mucho mayor del que suele tener el núcleo urbano.
Valga como ejemplo que el acumulado de la Casella (1.417 l/m2) duplica ampliamente el volumen de lluvia recogido en el observatorio del parque de l’Alquenència, dentro del casco urbano de Alzira y por tanto a menos de diez kilómetros, donde en el mismo período se contabilizan casi 641 l/m2, mientras que el pluviómetro ubicado en la azotea del ayuntamiento ofrece un dato incluso inferior con 615,4 l/m2.
La estadística de 2021 sitúa por detrás de la Casella dos observatorios que siempre suelen encabezar los rankings de precipitaciones como Barx-la Drova con 1.335 l/m2 y la estación Parpalló-Borrell (Gandia), con 1.331 l/m2. La orografía del terreno propicia estos altos niveles de lluvia en las zonas del prelitoral al sur del golfo de València, según destaca Toni Rubio, socio de Avamet y técnico de la Fundación para la Investigación del Clima, que adelanta que la estación de la Casella se acaba de integrar en la red de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet).
Registro inferior en la montaña
Rubio advierte de que se requiere de un período de análisis más largo para sacar conclusiones sobre el régimen de lluvias del valle, aunque destaca que un segundo punto de control que tiene en las montañas de la Casella desde 2018 ofrece registros algo inferiores, «aunque siempre ha estado por encima de los mil litros -este año el acumulado se sitúa en 1.165 l/m2-, lo viene a confirmar que en años buenos tiene facilidad para superar ese volumen, algo que en la provincia de València solo pasa en la zona de Barx». El técnico destaca que se trata de datos provisionales, aunque no augura grandes diferencias en el momento de cotejar las cifras.
El episodio de intensas precipitaciones del mes de septiembre fue con 333,2 l/m2 el que dejó un mayor volumen de lluvias en la Casella, seguido por la tromba de noviembre, un mes en el que el mismo observatorio ofrece un acumulado de 211,2 l/m2. En seis de los doce meses del año se han superado los cien litros por metro cuadrado en esta estación.
Las escorrentías que bajan por el barranco de la Casella junto a las aportaciones de otros torrentes de la cuenca este y, en particular, del Barranc de l’Estret, que baja por el valle de Aigües Vives, se han convertido en la principal amenaza para Alzira en materia de inundaciones.
Los estudios técnicos encargados por el ayuntamiento señalan como una prioridad la ampliación del barranco de la Casella en el tramo final y, en particular, el actual Pont de Xàtiva -el paso de la carretera CV-41 sobre el barranco- que representa un cuello de botella para el paso de las aguas en episodios de fuertes lluvias.
