La procesión de San Vicente, celebrada en el día grande de las fiestas de Cullera, estrenó el lunes el «Baile de la Moma», representado por la Escola Municipal de Tabal, Dolçaina i Danses de Culllera. Es una danza tradicional valenciana que forma parte de la procesión del Corpus, aunque también se representa en desfiles religiosos importantes y ahora se ha recuperado en la capital turística de la Ribera.
La Virtud o Moma es el personaje central de la danza y va vestida totalmente de blanco, el color que simboliza la gracia, mientras que los Momos, que representan los pecados o vicios, llevan una vestimenta en la que predomina el color rojo y el negro, característicos del infierno y el demonio. Cada una de las figuras que interpretan los bailarines tienen el valor simbólico de la lucha entre la virtud y los pecados. La parte final del paloteo significa el desorden y la batalla entre los vicios, por encima de los cuales gana la virtud.
La música es muy sencilla, una dolçaina toca la melodía y un tabalet la acompaña con un ritmo ternario. Se lleva a cabo en diversas poblaciones de la Comunitat Valenciana, como València, Sueca, Gandia, Xàtiva, Ontinyent, Silla, Benetússer y desde este año también en Cullera.
«Todo surgió tras unas conversaciones con los miembros de la Escola Municipal de Tabal, Dolçaina i Danses de Cullera. Decidimos poner en marcha los preparativos para recuperar este baile e incluirlo dentro de la procesión del día grande de Cullera», ha explicado la concejala de Patrimonio Histórico, que también ha subrayado el « importante esfuerzo llevado a cabo para incorporar el baile a la procesión del día de San Vicente», ha asegurado Amparo Jover.
«Se trata de recuperar los bailes tradicionales populares valencianos para sumarlos a los que ya se realizan en los diferentes actos que se celebran en nuestro municipio», concluye la concejala.