La festividad de San Isidro congregó el domingo en una comida a 430 agricultores en Carcaixent. El Hort de Carreres fue el lugar escogido para celebrar el acto, al tratarse de un recinto con un amplio aforo y tradición agrícola.
«Hacía tiempo que se quería organizar un evento de estas características, pero la pandemia dificultó la organización», confirma Francisco Timor, delegado de AVA en Carcaixent, y promotor del acto. Los asistentes pagaron un precio simbólico de un euro, simplemente para tener una idea de la cantidad de personas que iban a acudir.
El lugar en el que se celebró esta «renovada» edición de San Isidro fue en el Hort de Carreres. Este emplazamiento mantiene plantaciones de naranjos centenarios y un pequeño museo agrícola aún en construcción. «Escogimos este sitio porque nos parecía simbólico celebrar nuestro día junto a un pequeño jardín botánico de la naranja», explica Timor. Al acto acudieron personalidades como concejal de Agricultura, Sara Diert; el alcalde de Carcaixent, Francesc Salom, y el presidente de AVA-Asaja, Cristóbal Aguado.
Aproximadamente 500 personas no pudieron asistir por restricciones de aforo. La organización pretende repetir el acto en el futuro en lugares con más capacidad. «Esperamos que en los próximos años se pueda convertir en una fiesta de referencia para los agricultores de la zona», afirma Tiimor. En anteriores ediciones de esta fiesta, la asistencia fue mucho más reducida, principalmente por la capacidad de los locales donde se celebraba. «Ante la creciente afluencia de agricultores que se apuntaban cada año, decidimos apostar por aumentar el aforo y el recinto», señala Timor.
