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Una decena de eurofans de la Ribera arroparon a Chanel en Turín

Vecinos de Alberic, Carlet, Castelló o l’Alcúdia o Cullera viajaron a Italia para presenciar los espectáculos que ofrecía el festival de Eurovisión

Eurovillage momentos antes del comienzo de la Gran Final de Eurovision | REGINA GARCÍA

Eurovision es un acontecimiento que reúne cada año a miles de personas de varios países europeos, incluso del resto de continentes. Este 2022 Turín fue la ciudad encargada de albergar el festival número 66, a la cual asistieron una gran cantidad de valencianos y especialmente vecinos de la Ribera. Toda la semana estuvo repleta de espectáculos, concluyendo con la Gran Final, en la que la representante española Chanel consiguió el tercer puesto y 459 puntos.

Eurofans de Alberic frente al escenario eurovisivo. | REGINA GARCÍA

La cita anual de «El Festival de la Canción de Eurovision» (ESC) es una de las fechas señaladas del año para todos los eurofans a nivel internacional. Concretamente, el mes de mayo concentra los actos más mediáticos del festival. Esta edición ha reunido a un gran grupo de ribereños, que pese a ser de poblaciones diferentes, les unía el mismo sentimiento. Alberic, Carlet, Castelló y l’Alcúdia fueron algunos de los pueblos con más eurofans presentes en Turín, aunque también se podían encontrar vecinos de Torrent, Picassent, Enguera, Canals y Valencia capital. El alcalde de Cullera, Jordi Mayor, también se dejó fotografiar con una bandera española en el recinto que albergó el festival.

Al formular la pregunta de a cuantas ediciones eurovisivas habían asistido, las respuestas eran muy variadas. «Yo llevo viniendo aproximadamente 16 años a Eurovision», confirma Arturo Briz, vecino de Alberic. Otros no tenían tanta experiencia, como el carletino Guillem Esparza, que debutaba en el festival este mismo año. Pero la realidad dejaba entrever que no importaba el número de veces que hubieran asistido, la primera vez que entraban al recinto, la sensación de emoción les invadía a todos por igual.

Algunos de los eurofans ribereños pudieron ver la Gran Final en la Eurovillage, recinto donde los fans de ESC tienen el acceso gratuito y se ofrece la oportunidad de ver actuar a una gran cantidad de artistas en vivo antes del festival. Los más afortunados pudieron estar apoyando a Chanel desde dentro del recinto del Pala Olímpico, en el que se veía una gran mayoría de banderas de España ondeando. Según varias personas que salían del Jury Show, ensayo que se realiza la noche anterior al festival, en el que los jurados profesionales determinan el 50% de los resultados, cuando salía Chanel, se caía el estadio entre los vítores y los aplausos que daban los asistentes.

La candidatura española de este año proporcionó desde las semanas previas a Eurovision una sensación fascinante tanto en el público español como en el internacional. Por primera vez en muchos años, España estaba en el top 5 de las casas de apuestas europeas y muchos eurofans no veían lejano el triunfo de Chanel. Según Briz, «es la primera vez en muchos años que tenemos expectativas reales de quedar primeros». La opinión no distaba mucho al preguntar a los eurofans ingleses, ya que su candidatura se mantenía en el primer lugar de las apuestas. España, por fin, estaba preparada para quitarse de encima la leyenda negra que le persigue durante casi una década.

Finalmente, Ucrania se hizo con el galardón eurovisivo, el micrófono de cristal. El top 3 lo completaban Reino Unido y España, con una tercera posición que no alcanzaba desde hacía 27 años y un récord histórico de puntos.

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