Podem plantea un gran depósito para laminar crecidas de los barrancos y evitar que Alzira se inunde

Las posibles soluciones a la amenaza que representa el barranco de la Casella para el núcleo urbano de Alzira, con los informes encargados por el ayuntamiento y la Confederación Hidrográfica del Júcar que señalan la necesidad de ampliar el Pont de Xàtiva como piedra angular, han generado un amplio debate en los últimos años, al que se ha sumado el candidato de Unides Podem Alzira con una propuesta novedosa. Agustín Pérez, arquitecto que ejerce como profesor en la Universitat Politècnica de València, plantea crear un gran depósito de acumulación de aguas pluviales en la partida de Fracà, que recoja tanto las escorrentías del barranco de la Casella como de l’Estret, como forma de regular las crecidas de estos torrentes, facilitar el desagüe por el Pont de Xàtiva, uno de los puntos más críticos, y posibilitar que el Canal de Les Basses, que recoge las escorrentías de los barrancos de la cuenca del Respirall, pueda desaguar, al que no sucede actualmente cuando el Casella baja hinchado.

Agustín Pérez cuestiona que solo con la ampliación del Pont de Xàtiva, el paso de la antigua carretera de Carcaixent sobre el barranco de la Casella, se pueda alcanzar el objetivo de desaguar más de 400 m³/sg, frente a los 74 que pueden pasar en la actualidad, y aboga por abordar la solución aguas arriba, con una “infraestructura mínima que permita laminar” las crecidas de ambos barrancos, antes de su confluencia a la altura del Pont dels Cordellers. Pérez plantea aprovechar una superficie agrícola con numerosos campos abandonados, que quedaría delimitada en sus laterales por los propios barrancos de la Casella y l’Estret, para construir este depósito de tormentas de unos 30.000 metros cuadrados que recibiría las escorrentías de ambos torrentes. La propuesta contempla diseñar este depósito de tormentas con aliviaderos en la parte baja para permitir que el agua discurra en períodos de precipitación normal, y con rebosaderos en su parte superior para limitar el aforo total en caso de lluvias torrenciales.

El técnico estima que esta infraestructura podría acumular 90.000 m3, el doble que todo el canal de Les Basses

“Esta infraestructura permitiría aumentar la capacidad de acumulación de escorrentías en unos 90.000 m³, prácticamente el doble de la capacidad de los canales actuales”, que en base a los datos facilitados por el ayuntamiento, es de unos 50.000 m³, de los que 30.000 corresponden al ya existente y los otros 20.000 a la prolongación que se encuentran en ejecución, “y hacerlo suficientemente lejos de las compuertas para garantizar el funcionamiento del canal”. El técnico señala que el volumen de agua de lluvia retenida contribuiría a mantener el caudal ecológico del Xúquer con un vertido regular “en lugar de un vertido torrencial” y a rellenar los acuíferos de Vilella.

“Se trata de intentar retener una cantidad suficientemente grande de agua durante el tiempo suficiente para que no sumen los caudales y diferir en el tiempo el vertido de esa agua en el Xúquer”, explica el candidato de Unides Podem a la alcaldía de Alzira, que considera que se trata de una actuación que se podría acometer con antelación a las obras de ampliación que se están planteando “con mucho menor coste y con un impacto menor”, que contribuiría a paliar el problema.

Agustín Pérez plantea que en base a la pendiente y anchura del cauce, incluso en el caso de ampliación, resulta “muy optimista” considerar que se pueden llegar a evacuar 400 m3/sg. En el mejor de los casos entiende que serían 230. “Si las escorrentías procedentes de los barrancos de la Casella y de l’Estret no pueden ser evacuadas, como parece probable, no será posible abrir las compuertas del canal actual (ni de la extensión en construcción que recogerá las escorrentías de los barrancos del suroeste)”, señala, antes de concluir que, “a pesar de haber construido una extensión del canal, seguirá inundándose el barrio de Les Basses”.

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