Nueve millones de machos estériles para combatir el mosquito tigre

La Conselleria de Agricultura, Desarrollo Rural, Emergencia Climática y Transición Ecológica elevará este año hasta nueve millones de ejemplares la suelta de mosquitos tigre machos en el proyecto piloto de lucha biológica mediante la Técnica del Insecto Estéril (TIE) que impulsa desde el año 2017 en la Ribera Baixa. 

Se trata de una cifra récord en esta experiencia que en años anteriores ha conseguido reducir hasta un 75 % la población de mosquitos tigre, en base al seguimiento que los técnicos realizan en el municipio en el que se efectúan la sueltas en comparación con otro de similares características que utilizan como espejo. En 2022 se soltaron ocho millones de insectos en la Ribera Baixa. La liberación de machos estériles se retomó a finales de febrero en esta nueva temporada con el objetivo de anticiparse a la aparición de los primeros individuos silvestres, que suele darse en primavera.

El calor provoca una eclosión insólita del mosquito tigre en la Ribera en pleno invierno

La Técnica del Insecto Estéril (TIE) es un método de control biológico de plagas que consiste en la cría masiva de insectos macho de la misma especie que se pretende combatir, que son esterilizados mediante irradiación y liberados en el área de actuación.

Poner freno a la reproducción

Estos machos estériles se aparean con las hembras silvestres, lo que provoca que los huevos que éstas producen sean inviables y no den lugar a descendencia, lo que se traduce en una reducción de los niveles de la plaga. Se trata de la misma técnica que la conselleria ha utilizado en la lucha contra la mosca del Mediterráneo («Ceratitis capitata») en los cítricos. En el caso del mosquito tigre (Aedes albopictus), es la hembra la que provoca la molesta picadura, por lo que la suelta de machos no tiene incidencia sobre las personas. El secretario autonómico de Agricultura, Roger Llanes, ha explicado que en la medida que se ha mejorado la capacidad de producir insectos estériles se han incrementado también las sueltas.

El problema generado por la expansión del mosquito tigre, que en la Comunitat Valenciana fue detectado por primera vez en 2005 en la localidad de Orihuela, llevó a la Conselleria de Agricultura a diseñar un proyecto piloto de lucha biológica que empezó hace seis años la Ribera Baixa. En concreto, los técnicos seleccionaron las localidades de Polinyà de Xúquer y Albalat de la Ribera con este fin. En la primera realizaban las sueltas de machos esterilizados mientras que la segunda se tomaba como municipio de control hasta que, el año pasado, se amplió el trabajo de campo y se soltaron en Albalat cinco millones de mosquitos. En esta nueva fase se tomaban las localidades de Riola y Llaurí como espejo o áreas de control.

Los buenos resultados conseguidos desde el primer momento y el aumento de la capacidad de producción de machos estériles gracias al desarrollo de la tecnología y equipamiento, ha propiciado que en los últimos años se haya multiplicado por cuatro la superficie sobre la que actualmente se están liberando machos estériles en diferentes proyectos piloto ya que además de ampliar el área de estudio en la Ribera Baixa la conselleria también ha trasladado esta experiencia a Vilavella (Castellón) y a Paterna. 

Estos trabajos de campo para poner freno a la expansión del mosquito tigre incluyen la evaluación de diferentes estrategias de control en entornos urbanos diversos con el objetivo de determinar las variables que influyen sobre el éxito del TIE en el control de la plaga así como el efecto de diferentes métodos complementarios de lucha. 

Métodos complementarios

Asimismo, según explican fuentes de la conselleria, se están evaluando diferentes métodos complementarios de lucha, como la instalación de trampas, la liberación de machos estériles en áreas periféricas, la aplicación de larvicidas biológicos o la concienciación y participación ciudadana.  

Con todo el trabajo de campo se pretende definir un programa de lucha integrada contra el mosquito tigre que permita reducir de manera efectiva las poblaciones silvestres de esta plaga, que ya está presente en prácticamente toda la Comunitat Valenciana, y que no solo produce molestias por sus picaduras sino que además es vector de hasta 22 enfermedades, entre las que destacan el Dengue, Zika o Chicungunya.