La victoria del Alzira FS ante el Inter infunde esperanzas en la plantilla

“Haciéndonos fuertes en casa, con tantos puntos por disputar, se puede pensar en la permanencia”, reflexiona Braulio Correal

Rubi celebra junto a Braulio el triunfo ante el Inter.

Rubi celebra junto a Braulio el triunfo ante el Inter. / C. Cortés

David Chordà

Alzira

El Family Cash Alzira FS no podía dar un mejor regalo a sus aficionados estas navidades: la primera victoria contra el histórico Inter en siete enfrentamientos. El triunfo por 2-1 es doble porque la mala noticia de la victoria de Ribera Navarra traía una positiva, la derrota del Noia. Con los tres puntos del sábado, la permanencia está a solo cinco y también se reducen tres unidades con Betis, Córdoba y Peñíscola. “Los chicos se lo merecían. Cerramos un año histórico esperanzados y con un broche de oro con la previa de la presentación de la escuela 360”, comentó Braulio Correal al finalizar el encuentro. Otra de las dedicatorias fue para la afición: “Mil gracias porque nos llevó en volandas cuando estábamos extenuados físicamente”. 

Gonzalo Castejón conduce el esférico.

Gonzalo Castejón conduce el esférico. / C. Cortés

El triunfo, como no podía ser de otra manera, fue sufridísimo. Los interistas salieron como un ciclón para no fallar, como en las dos derrotas previas ante rivales de la parte baja. Su máximo goleador, el albaceteño Raúl Gómez, fue un tormento con tiros de diferente índole que o fueron detenidos por un Fede acertadísimo o se encontraron con el palo. Además, los ribereños fallaban pases y marcas que propiciaban las ocasiones de los de Torrejón de Ardoz. Al Family le costaba poner en dificultades al joven Jesús García, que sustituía al internacional Jesús Herrero. A 3’49” para el descanso, llegó el primer gran momento alzireño. Gon Castejón sacaba una falta de cuchara, que a los más veteranos recordó a los pases de Choco, y, contrariamente a su estilo, Rubi marcó con un toque sutil en lugar de su habitual cañonazo. Los 2.000 espectadores presentes empezaron a defender con los jugadores. Fede seguía parándolo todo, incluso con la cara.

Transcurrido el primer minuto del segundo acto, llegó un jarro de agua fría. Pablo Ordóñez aprovechó un fallo de marca para anotar su primer gol como interista. El joven jienense ya le marcó al Alzira cuando estuvo cedido en el Mengíbar por el Jaén. Los árbitros, que habían estado muy correctos en la primera parte, pitaron cuatro faltas en seis minutos a los alzireños que les condicionaban doblemente. A 3’22 para la conclusión, el Family gozó de una falta a diez metros. El técnico Luis Hernando auguró desde la grada que la opción sorpresa sería la de Carlos Gómez en lugar del diestro Rubi. Dicho y hecho. El jugador cedido por Palma chutó con potencia y Jesús García no pudo reaccionar. Alberto Riquer sacó portero jugador y los ribereños defendieron como jabatos, además de que volvió a salir la mejor versión de Fede. Incluso tuvieron tres disparos sin guardameta que fueron despejados por los visitantes.

Usín y Castejón festejan el resultado.

Usín y Castejón festejan el resultado. / C. Cortés

“Hay que darle la enhorabuena a los jugadores porque han hecho un esfuerzo tremendo a nivel defensivo. Lo demuestra el hecho de encajar solo un gol con la ventaja cualitativa de Inter”, explicó Correal, que mantiene las esperanzas de cara a la segunda vuelta: “Haciéndonos fuertes en casa, con tantos puntos por disputar, se puede pensar en la permanencia”. Braulio añadió que “el triunfo contra este rival es un estímulo porque la otra victoria también fue contra un equipo de la parte alta". "Esto muestra y demuestra que podemos seguir trabajando con ilusión y esperanza”, añadió. Ahora toca coger fuerzas y recuperar efectivos como Humberto, amén de los fichajes que puedan llegar en el mercado de invierno que se abrirá en enero.

Los azulones jugarán el 6 de enero en Peñíscola la semifinal de la Supercopa Comunitat contra el Picassent de Segunda B. De ganar, disputaría la final al día siguiente ante los peñiscolanos o la Nucia. El sábado 13 de enero jugarán en Cartagena contra el tercer clasificado, el Jimbee. Será el último encuentro antes del parón de un mes por la disputa de la Selección Española de la Copa Confederaciones.

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