Calma tensa en Algemesí ante la crecida del Magro
El ayuntamiento está pendiente del cielo por si nuevas lluvias desbordan el río
Óscar García
El río Magro pasa por Algemesí rozando su límite. De hecho, se viven momentos de calma tensa. A pesar de que el volumen de lluvias en la localidad ha quedado lejos de los espectaculares registros que se han anotado en municipios vecinos, la crecida del Magro podría provocar un desbordamiento.
"El margen interior, que da a la población, no supone un problema porque es más elevado, pero el derecho, que es más bajo, está al límite", admite el alcalde, José Javier Sanchis. El ayuntamiento ha revisado las casetas diseminadas de la zona y ha cortado tanto la pasarela como el camino de Berca, que discurren hasta el colegio de los Maristas.
Una máquina retroexcavadora limpia el Magro para facilitar el paso de la corriente de agua. / Levante-EMV
Mientras, los operarios municipales intentan, con máquinas retroexcavadoras, extraer del río las cañas y la suciedad para garantizar una mejor el paso de la corriente de agua.
"Seguimos pendientes del cielo, aquí no ha llovido tanto como en otros lugares, hemos sido una isla, pero el río va muy lleno y si se producen nuevas precipitaciones podría desbordarse, aunque no hay riesgo para la población", sentencia.
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