El Ayuntamiento de Alzira media para evitar que la crisis con la fallera mayor acabe en el juzgado

Una reunión entre integrantes del gobierno municipal y de la JLF analiza la situación en busca de una resolución que frene el deterioro de la imagen de la fiesta que provoca el conflicto

Zaira Cano y su corte de honor junto a dos de los directivos de la JLF, Paqui Vallés y Adrián Sarria.

Zaira Cano y su corte de honor junto a dos de los directivos de la JLF, Paqui Vallés y Adrián Sarria. / JLF

Rubén Sebastián

Rubén Sebastián

El Ayuntamiento de Alzira ha ejercido como mediador en la crisis surgida entre la Junta Local Fallera y la fallera mayor del ejercicio 2024, Zaira Cano, a raíz de la sanción impuesta por la JLF a Cano por la cual veta su participación en los actos oficiales de las fiestas, a los que no podría acudir como representante saliente de las Fallas. El problema podría tener que resolverse en los juzgados.

Según ha podido saber Levante-EMV, el domingo, varios integrantes del gobierno municipal y de la Junta Local Fallera se reunieron con el objetivo de analizar la crisis y reconducir el conflicto para, en la medida de lo posible, evitar que acabe en los juzgados tras asegurar Cano y su abogado que tenían intención de emprender acciones legales. En el seno del ejecutivo local, preocupa el deterioro y desprestigio que pueda sufrir la imagen de las Fallas de Alzira, declaradas Fiesta de Interés Turístico Nacional, a raíz de un conflicto que, esperan, pueda resolverse sin necesidad de llegar a los tribunales. El caso ya ha adquirido notoriedad suficiente, pero la celebración de un juicio podría suponer una mácula de difícil borrado.

El conflicto, como ya avanzó este periódico, estalló cuando la Junta Local Fallera vetó la participación de la fallera mayor de 2024 tanto en la gala de exaltación de su sucesora -pospuesta por la dana al próximo sábado- como en otros actos oficiales que pueda organizar en el futuro la propia JLF. Así lo resolvió la comisión de incidencias «tras analizar diversas actuaciones (de Cano) a lo largo de todo el ejercicio fallero que afectan a la imagen y el protocolo de la institución»

La decisión se precipitó tras el acto de proclamación de las reinas josefinas del próximo ejercicio, si bien fuentes consultadas han señalado que se habrían producido momentos tensos entre Cano y la directiva de la junta desde que Bernardo Cortés cedió la presidencia a Paqui Vallés, ya en el mes de mayo y con el reinado de Cano encarando su recta final. 

Asamblea de presidentes

La propia Cano ya deslizó hace unos días que veía tras la decisión, precisamente, un movimiento motivado por «rencillas personales». Por su parte, la junta se ha mantenido firme, durante semanas, en su convicción de amonestar a la fallera mayor del pasado ejercicio por una sucesión de actitudes que habrían colmado el vaso de la paciencia de la actual directiva.

La directiva de la Junta Local Fallera ha convocado, en asamblea, a los presidentes de las treinta y cuatro comisiones josefinas de la ciudad esta noche. Si bien fuentes de la JLF insistieron la pasada semana en el conflicto entre el ente organizador de las fiestas y la reina del último ejercicio no formaba parte del orden del día, el problema ha adquirido tal magnitud que sería que resulta impensable que se cierre la sesión sin abordar el tema por la preocupación que genera en el colectivo.  

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