La falta de un espacio para los enfermos de Alzheimer acelera su deterioro

El Ayuntamiento de Algemesí habilita una nueva sede para los 70 usuarios tras más de 40 días con el centro inutilizado

Las obras se prolongarán dos meses más

Estado del edificio de ASFAL en Algemesí tras las inundaciones.

Estado del edificio de ASFAL en Algemesí tras las inundaciones. / Levante-EMV

Saray Fajardo

Saray Fajardo

La Asociación de Familiares y Amigos del Alzheimer de Algemesí (ASFAL) recibió ayer una de las noticias más esperadas tras más de un mes paralizados por la catastrófica dana del pasado 29 de octubre. ASFAL, como la mayoría de viviendas, comercios y edificios públicos de esta localidad, quedó completamente anegada tras el desbordamiento del río Magro. El centro situado en la calle de la Safor perdió gran parte del equipamiento (butacas, ordenadores o mobiliario, entre otros), que se llenó de agua y lodo. Durante este tiempo, la asociación ha permanecido cerrada a la espera de las evaluaciones técnicas necesarias con el fin de poder retomar la actividad lo más pronto posible.

Los 70 usuarios de esta asociación afortunadamente recuperarán la actividad en un par de semanas, ya que el consistorio les ha cedido el local de la antigua Sala Rex, que se había convertido durante este último mes en un centro logístico. "Recibí la llamada del alcalde, José Javier Sanchis, anunciándome que iba a habilitar este espacio con todo el material necesario para que podamos retomar la actividad", agradece la presidenta de ASFAL, María Bueno.

Bueno recalca la importancia de esta asociación que atiende la necesidad de estos pacientes con fases de la enfermedad muy distintas. "Aquí hay gente que se vale por ella misma, otros que tenemos que cambiarles o darles la comida y gente más deteriorada", señala la presidenta. Desde las 8 h -y hasta las 20 h-, los usuarios realizan distintas actividades y talleres para estimular los sentidos y la memoria. Los propios trabajadores del centro se encargan de recogerles con las furgonetas adaptadas en sus casas y los regresan cuando termina la jornada.

Sin embargo, durante estas cinco semanas, los usuarios han tenido que trabajar en casa junto a sus familias, ya que el centro estaba completamente arrasado. "Nos hemos quedado sin nada. Cuando lo vimos por pimera vez, no tenía nada que ver con la última imagen que conocíamos de la asociación. Es desolador", lamenta Bueno, que todavía se emociona al recordar todo lo vivido. Agradece que el consistorio decidiera suspender las clases durante aquella fatídica jornada, ya que, al tratarse de un centro municipal, ellos también permanecieron cerrados. "Podemos sentirnos afortunados porque todos están bien. Menos mal que no vinimos porque sólo está habilitada la planta baja. No sé si nos hubiera dado tiempo a rescatarlos a todos", explica.

Trabajo a contrarreloj

Durante estas semanas, los trabajadores han intentado adecuar las instalaciones, pero la presidenta explica que es necesario acometer algunas obras. "Han venido muchos voluntarios a ayudar. La mayoría de barro y trastos los hemos podido retirar, pero no podemos regresar por el estado del lugar", explica. Calculan que las obras se demorarán cerca de dos meses. "Nuestra prioridad era retomar la rutina lo más pronto posible, por lo que íbamos a iniciar las atenciones domiciliarias", explica. El equipo había estado estudiando algunas alternativas como reubicarlos en otros centros de la comarca, pero "estaban llenos". Sin embargo, ahora podrán regresar a las actividades presenciales. "La prioridad es atenderles sea donde sea porque hay personas que no sabemos en qué estado volverán", lamenta. A pesar de ello, Bueno recalca que, en sus palabras, "no les hemos dejado abandonados en ningún momento, ya que hemos estado en contacto permanente con sus familias". Además, algunos trabajadores del centro se han desplazado hasta sus viviendas para trabajar con ellos.

Tras esta esperanzadora noticia, la asociación prepara su regreso a este nuevo espacio con el fin de devolver a los usuarios la rutina que la trágica dana les robó.

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