El milagro en uno de los aparcamientos subterráneos de Algemesí

Un mes y medio después de la catastrófica dana que azotó la provincia de Valencia, los efectivos siguen trabajando en una gran cantidad de municipios con el fin de intentar recuperar poco a poco la normalidad. Entre estos, se encuentra Algemesí, el epicentro de la catástrofe en la Ribera. Esta localidad sufrió las trágicas consecuencias del desbordamiento del río Magro, que se llevó consigo la vida de tres vecinos.

Sin embargo, entre tanta catástrofe, el aparcamiento subterráneo de la plaza del Mercado se ha convertido en un punto de esperanza. Desde el primer momento, las autoridades barajaban la posibilidad de que existiesen víctimas en este parking, ya que algunos presentes señalaban que habían visto a varios vecinos acudir a esta zona a por sus coches, pero no los vieron salir cuando el agua inundó por completo el aparcamiento. A pesar de los malos presagios, la situación ha sido totalmente distinta. En este aparcamiento no ha aparecido ninguna víctima, por lo que todo apunta a que los vecinos pudieron salir por otra parte o, incluso, no llegaron a acceder al recinto porque se dieron cuenta del peligro que podía suponer.

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Los efectivos siguen trabajando en este aparcamiento. Desde el primer día, y con el miedo de encontrar alguna víctima, concentraron sus esfuerzos para vaciar de lodo el aparcamiento. Casi cincuenta días después de la dana, siguen retirando lodo y vehículos anegados, pero con la tranquilidad de que nadie resultó dañado en esta zona.

Este aparcamiento está compuesto por dos espacios. En el primer sótano se depositan los vehículos de las personas abonadas, mientras que la segunda planta es utilizada por vecinos y vecinas que no acuden regularmente a este espacio.

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Trabajos en garajes y aparcamientos

Durante las últimas semanas, se ha intensificado el trabajo en los garajes y aparcamientos subterráneos que todavía contenían barro y vehículos inutilizables con el objetivo de evitar problemas de salubridad. La Diputación de Valencia se ha encargado de estas labores con la ayuda de maquinaria pesada con el fin de agilizar el proceso, ya que, en el caso de Algemesí, en algunos lugares el lodo se mezclaba con las aguas fecales.

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