Carlet asume el coste de la reparación para evitar los vertidos al Magro

Más de cincuenta días después de la dana, muchos de los daños causados en las infraestructuras de la comarca tras la crecida del río Magro siguen sin ser reparados. Entre ellos, se encuentra la rotura de la canalización que conecta las aguas residuales procedentes del polígono industrial de Carlet con la depuradora con el fin de evitar que estas terminen en el río. Tras un mes y medio de la catástrofe, las aguas residuales siguen vertiéndose en el Magro.

El ayuntamiento de Carlet busca una solución junto a la Confederación Hidrográfica del Júcar para revertir esta situación, aunque la alcaldesa de la localidad, Laura Sáez, ha recordado que todas las empresas que utilizan agua deben contar con depuradoras que realizan previamente un tratamiento.

"Hemos preparado la información y se la hemos enviado a la Confederación porque queremos empezar ya con estas obras", explica Sáez. Ante la situación de emergencia en la que se encuentran muchas localidades, y con el fin de acelerar el proceso, el consistorio se compromete a asumir el coste, que oscilará en torno a un millón de euros, y como ha explicado la primera edil, luego se subsanará a través de las subvenciones y ayudas proporcionadas por las administraciones con el fin de reparar los daños de la dana.

Polígonos de Carlet, Montroi y Montserrat vierten al Magro por los daños de la dana

El consistorio ha trabajado en dos propuestas, aunque Sáez apuesta por una en concreto. A través de esta, la primera edil indica que "se cambiaría el sistema de bombeo", ya que el lugar por el que pasaba la canalización anteriormente no se puede reparar en estos momentos, puesto que se están llevando a cabo los trabajos de reconstrucción del puente.

Este no es el único caso de la Ribera. En el caso de Montserrat, su alcalde Sergio Vilar, también reconocía que el área industrial se enfrenta a esta problemática, que "todavía no ha podido ser reparada".