El centenario Gremi de Fusters d'Alzira se disuelve ante la ausencia de relevo generacional
La asociación abrirá el dosel de Sant Josep por última vez durante las Fallas y quedará extinta tras las fiestas
Este año no organizará la procesión del patrón

La asamblea acordó la disolución del Gremi de Fusters. / Agustí Perales Iborra

El Gremi de Fusters d’Alzira tiene los días contados tras acordar su disolución en la asamblea del pasado miércoles por la noche. La extinción de la asociación, con casi 140 años de antigüedad, será afectiva tras las próximas Fallas.
«Se ha agotado el ciclo y teníamos fecha de caducidad», lamenta su todavía presidente, Vicent Pla. La asamblea debía votar un nuevo dirigente, pero ninguno de los socios restantes, menos de diez, presentó candidatura alguna, por lo que se acordó la disolución del gremio.
«El Gremi de Fusters ha sobrevivido en los últimos más como ente festivo que como profesional, pero ya no queda nadie y no podemos continuar. Apenas quedábamos unas cinco personas, por lo que ya no tenemos recursos humanos ni económicos», comenta Pla a Levante-EMV. Sin embargo, según argumenta, ni siquiera el hecho de ser también un colectivo festivo ha sido una garantía de éxito. «Celebramos nuestro patrón, Sant Josep, al mismo tiempo que las Fallas, y mucha gente ya paga una cuota para ser fallera y lo prefiere», expone Pla, que añade a continuación: «Sin embargo, es muy triste ver cómo se ha dejado de lado al propio patrón de la fiesta, ya que a la procesión que organizábamos todos los años no va nadie, apenas unas treinta o cuarenta personas. De hecho, nos ha pasado varios años que algunas personas veían el dosel abierto y se pensaban que estábamos ya preparando la Semana Santa».
De hecho, el gremio ha anunciado que este año no tiene pensado organizar la procesión de Sant Josep, aunque sí que abrirá el dosel dedicado al santo. Cuando bajen la persiana, la asociación pasará a la historia. Una que comenzó en 1887 y que se quedará a dos años de cumplir los ciento cuarenta.
Más de treinta talleres
«En la carpintería, como ocurre con muchos otros oficios tradicionales y artesanales, falta relevo generacional. Antes, te decían llévate a mi hijo y enséñale el oficio, ahora eso ya no ocurre», reflexiona Pla, que concluye con un mensaje autocrítico: «Si hace treinta o cuarenta años Alzira tenía más de treinta carpinterías, ahora pueden quedar unas seis o siete. Y veremos cuántas continúan en unos años. Nosotros somos los primeros que no hemos ayudado. Hemos preferido que estudien, cosa razonable, pero si ni nosotros hemos garantizado el relevo, ¿quién lo iba a hacer?».
Suscríbete para seguir leyendo
- Una falla de Alzira se ve obligada a pintar sus monumentos: 'El artista nos ha dejado la mitad de ninots sin terminar
- Pere Morell, la falla de Alzira que solo tiene 13 falleros: 'Cuando se acaben las Fallas veremos qué pasa. Vivimos el momento
- Un policía herido en el derrumbe de la andana de una casa en Algemesí
- «Vamos apretados como sardinas y presenciando desmayos»
- El aderezo que resistió a dos inundaciones en Algemesí
- Un hombre con enfermedad mental mata a su madre en Turís
- El Gobierno rechaza la planta fotovoltaica proyectada a 400 metros de l’Albufera
- La arena para la regeneración de las playas de Cullera augura quince años sin erosión