El CB Alginet recibe al líder pletórico de moral tras cuatro victorias consecutivas

El Rigalli Alginet juega este domingo una de sus finales que marcarán el devenir de la temporada. A las 18:00 horas, en el Pabellón Municipal de Alginet, los de la Ribera Alta se enfrentan al actual líder de la tabla, el Sercomosa Molina Basket. La liga está a cinco jornadas de terminarse y éste es uno de esos enfrentamientos que determinará cómo de a favor sople el viento para el Alginet en esta recta final de temporada.

Siguen habiendo muchos condicionantes y, obviamente, en una liga tan disputada, nada puede predecirse hasta el último aliento de juego. Lo único claro es que este domingo, el Rigalli Alginet desplegará ese baloncesto feroz, valiente y decidido que le ha caracterizado desde el inicio de liga y que le ha llevado a construir un proyecto con mucha personalidad y un juego propio muy apreciado para su afición.

Los azules cuentan con un grupo envidiablemente unido, que les permite disfrutar de cada uno de sus partidos a la vez que les empuja a luchar por cada uno de los balones sueltos en pista. Ya no solo por ellos mismos, sino por sus compañeros y amigos al fin y al cabo. Esa es parte la esencia de los proyectos que se construyen año tras año en Alginet, con ese gen guerrero que les motiva a luchar por grandes logros.

Volviendo al duelo del fin de semana, el primer enfrentamiento entre el Rigalli Alginet y el Molina Basket se lo llevaban los azules por 68 a 83 en Murcia. Sin embargo, los rivales llegan con una racha de nueve victorias, por lo que las pulsaciones altas estarán aseguradas.

Por su parte, el Rigalli Alginet viene con una buena racha de cuatro victorias y un rebufo emocional bastante bueno gracias a que sus dos últimos partidos los ha ganado por más de 40 puntos de diferencia y los otros dos por más de 30. Además, en su pasado encuentro ante el Denia Basket, los azules volvieron a superar su anotación máxima al alcanzar los 118 puntos.

Este encuentro del pasado domingo fue todo lo que el Rigalli Alginet sabe hacer bien. Desde el salto inicial supieron correr en ataque para aprovechar la superioridad numérica en el balance y armando un contraataque fugaz con tan solo tres pases. Si no era posible correr, los azules leían bien cuando jugar en estático hasta encontrar el hueco en la zona rival.

Aunque sin duda, el mayor logro del Rigalli Alginet en sus últimos partidos ha sido el férreo trabajo defensivo con el que agotaban el acierto rival y construían poco a poco una ventaja mayor. En su partido ante el Denia, los azules solo permitieron al visitante anotar 24 puntos en la primera parte y en su partido ante el Jorge Juan, el rival no pasó de los 34 puntos en 20 minutos, mientras que el Alginet había sumado dos parciales de 29 y 37 puntos, respectivamente.

De cara al próximo domingo el Rigalli Alginet espera llenar sus gradas para animar al máximo a sus jugadores. De primeras, se presenta un buen escenario para ello, ya que el encuentro coincide con el final de las fallas y el acercamiento al apretón final de temporada ante uno de los rivales directos de la liga. Los de la Ribera Alta disponen de una afición volcada en cada uno de sus partidos, así que no sería ninguna sorpresa ver las butacas pintadas de azul. Serán los restos de pólvora los que harán explotar el pabellón de Alginet.