El Alzira FS se aleja del título y del ascenso directo tras el segundo pinchazo en dos semanas (2-3)

El segundo pinchazo en dos semanas ha complicado el gran objetivo del Family Cash Alzira FS, el título de liga y el consecuente ascenso directo a Primera División.

La derrota por 2-3 contra el Levante se ha unido a otra victoria del Betis, 4-2 sobre El Ejido que da cinco puntos de ventaja a los sevillanos con doce por disputarse. Para más inri (nunca mejor dicho esta semana), los alzireños visitan el sábado al Málaga, tercer clasificado que de estar a nueve puntos hace dos semanas, se podrían poner a tres si ganaran los andaluces.

El partido contra el Levante fue de lo más emocionante ya que los levantinistas también ansiaban la victoria para entrar en zona play-off, incluso quedarse tercero si fallaba el Málaga. Los granotas se cerraban muy bien hasta que en minuto 4 Joan logró su particular venganza. En su último año en el Levante fue cedido al Mengíbar jiennense en lugar de haberlo hecho al Alzira, a 20 km de su casa. El cullerense tras parada de Nacho Serra lo batió en el segundo disparo.

Gustavão, que según ha podido saber Levante-EMV se ha comprometido por los dos próximos años con Viña Albali Valdepeñas, pudo tirar el Palau abajo si marca después de un gran regate. Sin embargo, al filo del ecuador, el ex del Alzira, Pablo García pilló a contrapié a Fede para lograr el empate. Nacho Serra empezó su particular espectáculo de atajadas con una doble parada a Lechero y Gus, por lo que Álex Naranjo buscó la escuadra en el siguiente disparo. También Ivi hizo un dribling impresionante pero su picada se fue por poco. Todo parecía ir relativamente bien y Fede hacía un doble regate que hizo al público corear su nombre. Incluso los porteros pugnaban por tener protagonismo goleador. En el último minuto, Nacho Serra obligó a Fede a parar su disparo y el exinternacional intentó marcar desde su campo.

La segunda parte empezó con un Alzira asediante y Serra tapó el mano a mano de Peiró y con otra contra, Modesto logró la remontada a los cuatro minutos. No se encontraba el marco levantinista y a siete para el final, Braulio sacó a Manolo para dar un punto más en ataque. A cinco para el final, los ribereños reclamaron que un balón había salido pero la jugada se convirtió en una contra que Pablo García culminó en el 1-3. Rubi salió de portero jugador y el asedio alzireño se multiplicó así como los paradones de Nacho Serra que se crecía. Incluso cuando frenaba algún mano a mano y el balón le superaba, su defensa la despejaba. En el último segundo, Gustavão regateó a Nacho e hizo el 2-3 definitivo.

“La valoración no es positiva porque no estuvimos bien. Fuimos por ráfagas y nos costó especialmente en defensa y en zona activa del balón. Tampoco le dimos velocidad al juego. Aunque Nacho estuvo muy bien, no hicimos finalizaciones efectivas”, resumió Correal.