"Algemesí va a tardar años en recuperar la imagen previa al 29 de octubre"
El consistorio ya ha adjudicado obras para actuar diez infraestructuras municipales
La renovación de la red de alcantarillado se convierte en uno de los mayores problemas

Operarios reparando el pavimento de la Plaça del Mercat, en una imagen de archivo. / Agustí Perales Iborra

Han pasado casi seis meses desde la trágica dana. El desbordamiento del río Magro anegó una gran cantidad de municipios de la comarca ocasionado numerosos daños. Las calles se encuentran completamente limpias de barro y agua, la práctica totalidad de los comercios han podido reabrir sus puertas y los damnificados trabajan para rehabilitar sus viviendas y comprar nuevos vehículos. Sin embargo, todavía queda una gran cantidad de obras que acometer, sobre todo a nivel municipal, medio año después de la riada.
Las primeras máquinas ya invaden algunas zonas de Algemesí, epicentro de la catástrofe en la Ribera. Tras elaborar las primeras memorias y proyectos, el consistorio ya está acometiendo algunas reparaciones en las infraestructuras dañadas. Para ello, y como explica el alcalde de la ciudad, José Javier Sanchis, los técnicos han sectorizado el municipio para "concentrar obras y, así, optimizar recursos con el fin de redactar las memorias que nos pide el Ministerio de Política Territorial". Cabe recordar que el consistorio cifró los daños en 149 millones de euros, mientras que el Gobierno de España anunció que destinará a esta localidad un total de 127,71 millones de euros.
El Centro de Día para enfermos de Alzheimer es una de las obras más avanzadas. Seis meses después de la riada, este espacio se encuentra prácticamente reformado. "En unas semanas finalizarán las obras, por lo que los usuarios podrán recuperar su normalidad total y absoluta", explica el primer edil. Los cerca de 70 usuarios fueron realojados en el Casal de Fiestas con el fin de garantizar su atención, mientras se acometían los trabajos de recuperación del espacio, que también ha sido proyectado en altura para prevenir inundaciones en el caso de que se produjera un episodio similar.
El consistorio, a su vez, ya ha adjudicado las obras de reforma de diez infraestructuras municipales afectadas, entre las que se encuentra el ayuntamiento, donde ya han empezado las tareas. "El resto de instalaciones están en proceso de redacción, ya que no podemos realizar las obras directamente", indica. Añade: "Muchos de estos están en redacción, por lo que las obras van a empezar pronto, ya que tenemos cerca de diez millones adjudicados".
La red de alcantarillado
La red de alcantarillado resultó gravemente dañada. De hecho, durante los últimos episodios de lluvia, se han producido pequeños embalsamientos en algunas calles, por lo que el consistorio tuvo que repartir sacos de arena para evitar afecciones en los inmuebles. "Es lo que más nos preocupa porque estamos a la espera de que el Ministerio para la Transición Ecológica publique la convocatoria y se asignen las cuantías", indica.
El primer edil señala que prácticamente toda la red resultó afectada por las inundaciones, aunque los daños varian dependiendo de la zona. Por ello, durante estas semanas, los técnicos han recalculado la red para poder "dimensionarla a la realidad actual". "Hay daños que son subsanables con una limpieza profunda y exhaustiva, pero hay otras zonas que necesitarán una renovación del propio colector", añade. El ayuntamiento incorporará cambios en algunos tramos para "mejorar la resiliencia, ampliar secciones y optimizar la respuesta de la red ante un momento puntual de carga".
El primer edil reitera que, a pesar de los avances, todavía quedan muchos trabajos que acometer, por lo que "tendremos que acostumbrarnos al ruido de las máquinas". "Estamos hablando de años para recuperar la imagen previa al 29 de octubre, ya que hay muchas calles que se tienen que levantar, colectores que vamos a ampliar y, por otra parte, un trabajo exhaustivo en las oficinas".
Primeras actividades
Sanchis reconoce que el municipio va recobrando poco a poco la normalidad. "Hemos retomado poco a poco la normalidad social con las Fallas o la Semana Santa", explica. A pesar de ello, el primer edil señala que "desde el ayuntamiento sólo podemos realizar pequeñas actividades como la Feria del Libro". "No podemos hacer grandes acontecimientos porque hay infraestructuras que no lo permiten", recalca. A pesar de ello, reconoce que el municipio está realizando un gran esfuerzo para recuperar la imagen.
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